Stellantis pelea por el apoyo del Gobierno para invertir 600 millones en Vigo

Manoli Sío Dopeso
M. Sío VIGO / LA VOZ

VIGO

M.Moralejo

Rueda garantiza el respaldo de la Xunta para completar la financiación y apuntalar su futuro

21 jun 2022 . Actualizado a las 20:11 h.

Si los plazos recién aprobados por la Comisión Europea para la descarbonización del automóvil se cumplen, en el 2035 Stellantis Vigo ya solo podrá fabricar coches eléctricos, porque los diésel y gasolina no podrán venderse en Europa a partir de esa fecha, y el mercado europeo es el destino de más del 90 % de los modelos que produce la planta gallega.

Es una exigencia política, de ahí que los fabricantes acudan a los Gobiernos en busca de ayudas para adaptar su potencial industrial a los nuevos requisitos de producción.

Stellantis Vigo y su red de proveedores de componentes con sede en Galicia planificaron una inversión de 1.200 millones en un proyecto, Autoáncora, que no pasó el filtro de los requisitos del Ministerio de Industria recogidos en el plan estratégico o PERTE del Vehículo Eléctrico y Conectado (dotado con 1.400 millones de euros, con cargo a los fondos europeos para la recuperación Next Generation), porque la multinacional superaba los plazos límite para ejecutar la inversión (diciembre del 2025).

Pero fuera del PERTE sigue habiendo fondos europeos, y en Stellantis Vigo no tiran la toalla. Cuentan con el apoyo manifiesto de la Xunta, y para escenificarlo, Alfonso Rueda realizó ayer su primera visita a la planta en calidad de presidente del Gobierno autónomo, todo un gesto de apoyo al sector, en un momento tan delicado. Rueda manifestó la intención de la Xunta de seguir apoyando al sector y a la planta viguesa, como ha venido haciéndolo en todos estos años; al tiempo que solicitó tanto al Gobierno como a Stellantis conocer el importe que el Ejecutivo gallego tendría que poner sobre la mesa para cerrar un acuerdo.

Un error del Gobierno

Rueda se comprometió, por un lado, a exigir al Gobierno central que «corrija el error» de dejar a Vigo fuera del PERTE y, por otro, «a prestar desde la Xunta toda la colaboración en el desarrollo de un proyecto vital para le economía gallega. El director de la planta, Ignacio Bueno, explicó que Stellantis sigue confiando en que las negociaciones con el Ejecutivo de Sánchez avancen, y cifró en alrededor de 600 millones la inversión que necesita Vigo para prepararse para una producción cien por cien eléctrica. Recordó que las negociaciones se están llevando a nivel de grupo con las tres plantas de Stellantis en España. El problema es que «los plazos que plantea el PERTE no encajan con los que la empresa ha planeado, ya que sus proyectos son más a largo plazo», e insistió en la necesidad de seguir avanzando en el diálogo con las Administraciones, sobre todo con el Ministerio de Industria.

Bueno también reclamó que es «necesario» que la fábrica tenga acceso a la red eléctrica de muy alta tensión «que daría estabilidad y calidad a la red». Lamentó que en este asunto las conversaciones con el Ejecutivo «no avanzan». Ignacio Bueno confirmó también la mejoría de las previsiones de producción para el segundo semestre, pero evitó garantizar la puesta en marcha de los turnos de fin de semana, que supondrían la creación de 1.400 empleos, por considerar que la crisis de los microchips aún no está superada, y sería una temeridad arrancar los nuevos turnos sin todas las garantías, algo que no ocurrirá hasta el 2023.

La planta gallega confirma el lanzamiento de la nueva Fiat Doblo en el mes de julio

Stellantis Vigo comenzará la producción en serie de la furgoneta Fiat Doblo a principios del mes de julio. Así lo confirmó ayer el director de la fábrica, Ignacio Bueno, tras la visita de Alfonso Rueda, aunque era ya sabido que la factoría trabaja desde hace meses en las preseries de esta nueva silueta, que será el primer modelo que salga de la que en su día fue la fábrica de Citroën bajo la marca italiana Fiat.

El nuevo vehículo comercial sustituirá en la línea de producción al monovolumen Citroën Grand C4 Spacetourer, cuya fabricación concluirá a finales de este mes, poniendo fin así a una gama que ha hecho historia. La primera entrega del monovolumen C4 en modo compacto tuvo lugar en el 2006. La segunda generación del vehículo comenzó a producirse en la factoría de Balaídos en el 2013, con sus versiones C4 Picasso, de cinco plazas, y C4 Grand Picasso, de siete asientos. Las ventas influyeron en la decisión de suspender la actividad del modelo: en el primer trimestre del 2021, se comercializaron únicamente 10.000 unidades en Europa.

La Fiat Doblo se ensamblará en la misma plataforma que las otras siluetas de vehículos comerciales que se producen en Stellantis Vigo bajo las marcas Peugeot, Citroën, Opel y Toyota; y también compartirá componentes de la red de proveedores gallegos. La previsión es que la planta produzca al año alrededor de 300.000 unidades de estas cinco siluetas.