El segundo tiempo comenzó igual, pero tuvo un momento complicado para el Guardés. Del 14-20, con el +6 en el marcador se pasó al 20-20. Un 6-0 de parcial a favor del conjunto vallesano parecía cambiarlo todo. Las de Prades se atascaban en ataque y el Granollers, en superioridad por la primera de la dos exclusiones de Paula Arcos, crecía en ataque.
Pero el empate coincidió con el fin de los dos minutos de exclusión de Arcos, y pese a la defensa individual a la que fue sometida, la alicantina se asoció con Pessoa para darle la vuelta a la tortilla en un suspiro, pasado del 6-0 al 0-6 de parcial y de nuevo los seis goles de renta (20-26) con ocho goles de la internacional. Para entonces, Carratú se había unido a las fiesta con dos paradores más que desquiciaban por completo a un Granollers que una vez más se estrellaba contra el muro de cuartos.