Los restos atraviesan la calle Policarpo Sanz antes de empezar la Porta do Sol
29 ene 2022 . Actualizado a las 01:07 h.El equipo de arqueología encargado de controlar las obras del túnel de la Porta do Sol-Elduayen ha destapado la bóveda del túnel peatonal que enlazó, desde la década de los años ochenta del siglo XIX hasta los años treinta del XX, las calles del Príncipe y Os Canos como paso previo a otro túnel que continuaba bajo Marqués de Valladares hacia la travesía de la calle Victoria, en el arranque de la Alameda. A mediados del pasado mes de julio, La Voz de Galicia ya informaba de la aparición, a través de unos sondeos, de varios muros de piedra bajo el inicio de la calle dedicada a Policarpo Sanz en dirección hacia Os Canos, aunque entonces no se excavó el lugar.
El túnel tiene 18 metros de longitud y 2,10 de altura. Se accede al mismo desde la rúa de Os Canos, a través de una puerta que utiliza la compañía eléctrica Fenosa. La parte más estrecha está construida en bóveda de cañón hecha con piedras de granito, mientras que el resto tiene el techo plano. La parte abovedada es la que ahora se puede ver al descubierto en la calle de Policarpo Sanz, aunque el equipo de arqueología sigue empleando la táctica de cerrar con vallas metálicas el perímetro para evitar que la ciudadanía observe lo que hacen dentro.
La entrada al túnel, cuando estuvo abierto y operativo, estaba justo al lado del comercio Fin de Siglo, junto a un establecimiento de venta de madera. De hecho, el Concello de Vigo tenía alquilado un espacio en ese túnel a un carpintero llamado Benito Varela. Los arqueólogos han localizado otros muros, incluso uno de ellos presenta una ventana.
Mientras estuvo activo, el túnel tuvo muy mala fama en la ciudad, especialmente, porque era utilizado por muchos hombres por la noche para miccionar, lo que dejaba un fuerte olor que hacía que fuese poco transitado. El primer tramo que quedó cerrado al público fue el que iba de la travesía de la calle Victoria a Os Canos. Durante algún tiempo se dejó abierto el superior. Ya durante la Segunda República, se tapió parte del túnel y se rellenó con escombro y grandes losas, según se recoge en la prensa del momento.
Vecinos y expertos piden más información y claridad en torno a la excavación de Elduayen
«Queremos información clara sobre lo que está apareciendo en nuestra calle», señala Rafael Ferradás, portavoz del colectivo Vigo Histórico. Añade que debería permitirse la accesibilidad visual a los trabajos, actualmente entorpecida por la colocación de una malla verde. Finalmente, Vigo Histórico, que ya advirtió con anterioridad al inicio de las obras que habría importantes hallazgos arqueológicos en la zona, cree que deberían musealizarse los restos hallados, dejando en manos de los técnicos el modo de hacerlo.
Por su parte, José Manuel Hidalgo Cuñarro, arqueólogo y exdirector del museo municipal, explica que los restos encontrados, «posiblemente del siglo XVIII o XIX» nos están hablando de las personas que vivieron hace un par de siglos en Vigo. «Solemos darle más importancia a los restos de la muralla o de una iglesia, pero qué pasa con las personas que vivían allí y esa arquitectura civil. Es un tema de gran sensibilidad porque si no entendemos lo más cercano, no entenderemos lo más lejano», explica.
Hidalgo Cuñarro critica además que se esté ocultado a los ciudadanos el trabajo arqueológico en la zona. «Los ciudadanos quieren ver porque les interesa y no puede ser que se lo oculten con una malla», apuntó.
La arqueóloga Elisa Pereira, miembro numerario del Instituto de Estudios Vigueses, destaca el hecho de que esta excavación se realice en un terreno público para reclamar mayor transparencia por parte del Concello de Vigo. Elisa Pereira señala que será la delegación de Patrimonio de la Xunta la que decida qué hacer con los restos hallados.