Defendió el permiso laboral para las madres ante Fraga en los años 80
25 ene 2022 . Actualizado a las 00:48 h.Nos ha dejado una de las empresarias más carismáticas y que más ha luchado por los derechos de las mujeres emprendedoras. María Teresa Vidal Gallego, Charo, como era conocida, será incinerada hoy en el crematorio de Pereiró en la intimidad familiar. La que fue presidenta de la Federación Gallega de Mujeres Empresarias y de la Asociación de Empresarias de Pontevedra fue una mujer pionera en la segunda mitad del siglo XX. Tuvo que luchar, pero consiguió hacerse un hueco en un mundo de hombres en los años 50, cuando no era frecuente que una mujer fuera adjunta a la dirección de ninguna empresa y menos en Galicia. Charo fue la cabeza visible de Santiago Vidal Gimeno S.A., una sociedad que fundó su abuelo en 1915 apoyado por un grupo de ingenieros que había llegado a Vigo para montar los tranvías eléctricos. A principios de los años 30, la empresa fue disuelta, pero su padre se propuso sacar a flote el negocio. Por aquel entonces, Charo deseaba estudiar Ciencias Exactas, pero su padre se opuso a ello y debió cambiar de vocación para hacer Magisterio. Al concluir su formación, dejó de lado lo que en aquella época hacían las mujeres, prepararse para el matrimonio y comenzó a aprender de su padre cómo llevar las riendas de la empresa.
Su sociedad marcó muchos hitos históricos. Por ejemplo, cuando prepararon la estructura eléctrica en el pazo de Castrelos para que viviera allí una semana Eva Perón.
Como presidenta de las empresarias de Galicia, uno de sus principales caballos de batalla fue que las cotizaciones de las bajas por maternidad fueran asumidas, no por las empresas, sino por el Estado para conseguir la igualdad de la mujer en los contratos. Defendió el permiso laboral para las madres en los años 80 ante el entonces presidente de la Xunta, Manuel Fraga.
María Teresa fue una una viguesa cien por cien y reconocida como Viguesa Distinguida. Nació en el Paseo de Alfonso, se casó en la Colegiata y trabajó en su tienda de la calle Elduayen. Siempre vivió en el Casco Vello y compatibilizó con mucho esfuerzo su labor de empresaria con el de madre de cuatro hijos.