El mantenimiento de las rampas mecánicas de la Gran Vía costará 6.300 euros al mes

a.martínez VIGO / LA VOZ

VIGO

Xoán Carlos Gil

El Concello saca a licitación el contrato para garantizar el funcionamiento de las pasarelas todos los días del año

25 ene 2022 . Actualizado a las 00:46 h.

Una vez finalizado el plazo de garantía por parte del contratista, ha llegado el momento de que el Concello se haga cargo del mantenimiento de las rampas mecánicas de la Gran Vía. Como la administración local carece de personal formado para este fin ni medios materiales, ha elegido la vía de la licitación para que sea una empresa externa la que se encargue de este trabajo.

La última Junta de Gobierno Local dió vía libre a la contratación del servicio de mantenimiento integral de estos elementos. Los técnicos municipales calculan que matener en perfectas condiciones de uso las rampas tendrá un coste de 6.292 euros mensuales, IVA incluido. El presupuesto base de licitación se estima en un máximo de 37.752 euros en seis meses. El valor estimado del contrato asciende a 99.840 euros, teniendo en cuenta las dos prórrogas de seis meses cada una y las posibles modificaciones, teniendo en cuenta los costes salariales según la normativa laboral vigente.

De esta forma, el Concello busca una empresa que se haga cargo de las rampas para garantizar que estén siempre en funcionamiento y que actúen de forma inmediata si, por cualquier motivo, se paran. El adjudicatario deberá contar con un servicio de asistencia permanente para la atención de las averías y emergencias. El tiempo de respuesta de los operarios debe ser inferior a las dos horas. Las averías que no ocasionen una parada de los equipos deberán estar resultas en una semana a contar desde que se dio el aviso.

Otro contrato

El Concello ya tiene firmado un contrato de mantenimiento integral de los elementos mecánicos a la intemperie con la empresa Thyssenkdrupp Elevadores que contempla la posibilidad de incorporar nuevos aparatos de transporte vertical. Sin embargo, este acuerdo no incluía la posibilidade de añadir el mantenimiento de rampas móviles, «xa que hasta ese momento os aparellos de transporte vertical exteriores do Concello de Vigo eran ascensores e escaleiras», según se expresa en el informe que justifica la conveniencia de contratar el mantenimiento integral de las rampas mecánicas de la Gran Vía.

Por otra parte, en dicho informe también se alega que las cubiertas de las rampas tienen unas características geométricas sensiblemente diferentes a las incluidas en el contra actual, «polo que non se pode realizar unha ampliación do actual contrato de mantemento».

La empresa seleccionada tendrá que llevar a cabo dos tipos de mantenimiento. Por una parte, el arreglo de las averías que se puedan producir a lo largo de su uso diario y, por otra, unas labores preventivas que garanticen la vida util de los equipos. «A coexistencia dos dous tipos de mantemento ten como obxectivo que os equipos instalados teñan en funcionamento operativo sen interrupción todos os días do ano», según el pliego de prescripciones técnicas.

La empresa tendrá que hacerse cargo además de la limpieza de todas las instalaciones, incluidos los elementos mecánicos, así como del control de apertura y cierre de las instalaciones, conforme a los horarios que fueron aprobados por el Concello, de domingo a jueves de siete de la mañana a once de la noche y los viernes y sábados hasta la medianoche.

Segunda fase

El coste del mantenimiento de las rampas mecánicas aumentará cuando se complete la segunda fase de las obras para llevarlas hasta la calle Nicaragua y que comenzarán en febrero. El gobierno municipal prevé que hacia la primera semana del próximo mes ya se corte el tráfico para iniciar la construcción. La idea es que el tramo se realice en un plazo de ocho meses para poder entrar en funcionamiento antes de la Navidad.

La segunda fase tendrá 150 metros de longitud y ha sido adjudicada por 4,2 millones de euros. Este tramo se dividirá en dos cintas. Una irá desde la calle Venezuela a la de Bolivia, mientras que la otra llegará hasta Nicaragua. Al igual que en el otro tramo, también habrá un jardín botánico y las cubiertas metálicas porticadas continuarán con el patrón de color arcoiris de la primesa fase con el mismo acabado de vidrio. El alcalde ha lamentado que las rampas no puedan empezar desde el principio de la Gran Vía «porque la Xunta no nos deja».