Adicam premia a una técnica de rayos de Povisa: «Las pacientes necesitan que las tranquilicen»

La Asociación de Diagnosticadas de Cáncer de Mama (Adicam), con base en Cangas, decidió dar su premio anual a la técnica de radiología Alejandra Vila, de Povisa, por su humanidad y empatía con las pacientes oncológicas. «Son momentos duros para las pacientes y ellas se abren; yo intento tranquilizarlas, sacarlas de ahí, hablarles, contarles anécdotas...», explica la técnica, que prepara a las enfermas para las mamografías y para las biopsias. Son pruebas a las que suelen llegar con una sospecha y con muchos nervios. La actitud de las personas que atienden a las pacientes no va a cambiar el diagnóstico, pero puede hacer que ese momento sea menos desagradable.

Alejandra Vila destaca también el papel de las familias. «Si la paciente quiere, yo intento involucrar al familiar, que entre y participe, y también procuro explicarle cuál es la situación», dice.

Desde que se hace una prueba hasta que la enferma recibe el diagnóstico pasan entre seis y diez días. No siempre aparece un tumor. «Muchas veces, ellas mismas vienen a contarme que dieron negativo», dice.

Alejandra Vila recogió el galardón en la gala que Adicam celebró el sábado y aún está emocionada. «No sé por qué me lo dieron», dice, «si yo no considero que haga nada especial, solo lo que me sale de forma natural, que e apoyar a las pacientes en un momento difícil». El colectivo de diagnosticadas, que en otras ocasiones ha premiado a médicos o científicos, buscaba en esta ocasión reconocer la empatía y resultó que muchas de las socias que habían sido tratadas en Povisa -el hospital de referencia para la gran mayoría de la población de Cangas- se acordaban de Alejandra.

Ella también recuerda a sus compañeros, la auxiliar Nuria y los doctores Rocha y Mera. Lleva desde el 2013 en la unidad de mama y reconoce que al principio le daba miedo trabajar en oncología. Pero ahora tiene la certeza de que a las pacientes les gusta cómo trabaja.

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