El Concello vigués no ve solvente a ninguna empresa para la obra de 426.000 euros
08 ago 2021 . Actualizado a las 13:31 h.El parque municipal de servicios de Lavadores no tiene quién lo reforme tras el devastador incendio que causó graves daños estructurales en su nave principal en 2017. El Concello acaba de declarar desierto el procedimiento abierto para la contratación de las obras sobre un precio base de licitación de 426.116 euros. Cinco empresas se presentaron al concurso. Dos fueron excluidas en una fase inicial y el resto no ha demostrado en los trámites finales de la adjudicación tener solvencia técnica o económica para hacer las obras.
Fue el 11 de diciembre cuando la Junta de Gobierno Local aprobó el expediente de contratación para que las empresas constructoras pudieran optar libremente al concurso. La mesa de contratación excluyó inicialmente a dos aspirantes, una por incumplir el pliego de cláusulas administrativas y la otra por plantear una oferta temeraria con valores anormales o desproporcionados.
La empresa Constructora e Ingeniería Messi quedó clasificada en primer lugar. El Concello le dio diez días hábiles para que aportase documentación. Una vez realizado este trámite, la mesa de contratación le dio otro plazo de tres días para que pudiese enmendar la acreditación de solvencia técnica y económica.
«O licitador non presentou documentación ningunha, polo que enténdese retirada a oferta e procede solicitar a mesma documentación ao licitador clasificado en segundo lugar», según consta en el expediente municipal. Pero nuevamente, volvió a pasar lo mismo. Zona de Obra O Rosal, segunda clasificada, no presentó en el plazo de tres días la documentación acreditativa de su solvencia técnica. El Concello entendió así por retirada su oferta y se dirigió a la tercera empresa clasificada, Construcciones y diseño Luicon que, según la mesa de contratación, no presentó la documentación de forma correcta. «Non hai máis licitadores clasificados, polo que procede declarar deserto o expediente», según expresa el acuerdo municipal.
El suceso
El siniestro se produjo en abril de 2017. El fuego comenzó tras incendiarse el autobús eléctrico del Casco Vello que se encontraba estacionado en el parque central de Lavadores. Un bombero dio la voz de alarma e inició las labores de extinción del fuego. Todo apunta que la causa del incendio fue la explosión de las baterías del autobús eléctrico. Cinco personas resultaron afectadas por la inhalación de humo, el bombero y cuatro trabajadores municipales que se encontraban en el lugar. Dos personas tuvieron que ser trasladadas a Povisa.
La nave principal quedó seriamente dañada tras el siniestro. Las reparaciones están pendientes desde entonces.
Las obras consisten en la reparación de la totalidad de los daños que fueron ocasionados por el fuego y, de paso, actualizar el edificio, en la medida de lo posible, a la normativa antiincendios y de accesibilidad.
El proyecto incluye la reconstrucción de las escaleras, instalación de un ascensor, un nuevo acceso al exterior, nuevos tabiques, puertas resistentes al fuego, renovación del forjado, de la carpintería exterior, de la fontanería y el sistema eléctrico.