El condenado por abusos tendrá que estar alejado cuatro años de la víctima e indemnizarle con 600 euros
14 jul 2021 . Actualizado a las 10:48 h.Un vigués de 50 años ha aceptado esta mañana dos años de cárcel por agarrar por la cabeza y besar en la boca a una niña de 10 años, hija de una inquilina de la vivienda que compartían dos familias.
El acusado pactó con la Fiscalía y se declaró culpable de un delito de abusos sexuales en una vista por conformidad celebrada esta mañana en la quinta sección de la Audiencia de Pontevedra, con sede en Vigo. A cambio, el ingreso en prisión ha quedado suspendido a condición de que no delinca.
Tendrá que estar alejado 200 metros de la víctima durante cuatro años y pagar una indemnización de 600 euros, lo que hará en un plazo de 24 mensualidades.
El tribunal preguntó si la familia de la niña seguía viviendo en la misma casa porque en ese caso el implicado tendría que abandonar el domicilio. Sin embargo, no será necesario porque la niña se marchó en diciembre del 2020 del inmueble. En la casa vivía el acusado con su esposa y una madre con cuatro hijos pequeños, entre ellos la víctima.