Stellantis lanza seis eléctricos en Vigo y abre opciones a una planta de baterías

M.Sío / M.Moralejo (fotos)

VIGO

M.Moralejo

El grupo invirtió 33 millones en el proyecto ahora compartido con Reino Unido

07 jul 2021 . Actualizado a las 22:14 h.

El coche eléctrico es el futuro. En eso ya no hay marcha atrás, a juzgar por el volumen de inversiones que los fabricantes están moviendo por todo el mundo. En ese mapa de la nueva movilidad, Galicia está ahora bien posicionada, pero puede y debe estarlo más. Y esa es la intención de la Xunta de Galicia, al presentado al grupo Stellantis (resultado de la fusión de PSA y Fiat) su candidatura para acoger en la comunidad una fábrica de baterías para coches eléctricos.

«Esa candidatura la conoce el grupo, que es quien establece sus prioridades. Pero esa candidatura está sobre la mesa y nosotros vamos a insistir» afirmó el presidente gallego, Alberto Núñez Feijoo, en el acto de presentación del arranque de producción de la nueva gama electrificada de seis modelos comerciales ligeros.

El anuncio de Feijoo se produce un día antes de que el presidente del grupo, Carlos Tavares, anuncie la ubicación de la tercera planta de baterías que Stellantis, a través del consorcio Total en el que participa, va a poner en marcha. A la espera de lo que diga hoy el patrón del grupo francoitaliano, la instalación apunta a localizarse en Italia, sumándose así a las ya en construcción en Francia y Alemania.

Sobre la candidatura gallega, Ignacio Bueno, director de Stellantis Vigo, afirmó que «el grupo sabe del interés de Vigo y de Galicia para que aquí haya una fábrica de baterías, e irá tomando decisiones y decidiendo ubicaciones sobre la marcha», afirmó.

El volumen de vehículos eléctricos asignados a la factoría gallega justifican en gran medida la instalación. Stellantis Vigo ya produce el todocamino Peugeot e-2008 (supone el 17 % de los 2.300 coches que salen cada día de la planta), al que en los próximos meses, a medida que avance el programa de industrialización, se irán sumando los seis nuevos modelos electrificados de las marcas Peugeot, Citroën y Opel, cada uno de ellos en dos versiones: polivalente (para uso como furgoneta o vehículo de ocio) o puramente comercial, presentados ayer en Vigo.

Según el programa establecido, en septiembre, Stellantis Vigo fabricará 91 de estos vehículos eléctricos al día y, en noviembre, alcanzará su velocidad de crucero: un nivel de producción de 224 unidades diarias. Para realizar esta producción, la multinacional, con el apoyo de la Xunta de Galicia, ha invertido en la planta 33 millones de euros adicionales y se han impartido más de 10.000 horas de formación.

La amenaza británica

Pero sobre este programa estrella de la automoción gallega ha aparecido una nube en el horizonte. La producción de estos vehículos no será exclusiva de la planta gallega. El propio Tavares anunció este martes la adjudicación a la fábrica Ellesmere Port de Reino Unido del ensamblaje de parte de la producción de las furgonetas eléctricas de Vigo, una apuesta por la automoción británica que irá acompañada de una inversión de 100 millones de libras (116 millones de euros).

La decisión, según explicó ayer Ignacio Bueno, obedece a la necesidad del grupo abastecer el incremento de la demanda esperada. «En ningún caso va a suponer un decrecimiento para nosotros» dijo. Al respecto, Núñez Feijoo afirmó que «de momento Stellantis está cumpliendo todos los pactos acordados y no nos preocupa», dijo.

Feijoo reiteró en Stellantis el compromiso del Gobierno gallego con la automoción, un sector que el año pasado facturó 10.950 millones de euros y da empleo a 25.000 familias gallegas. Según los datos aportados por el grupo, Stellantis tiene en estos momentos en el mercado 30 modelos eléctricos de 6 marcas diferentes y a finales de año la cifra se elevará a 40 modelos de todos los segmentos.

La nueva gama de vehículos comerciales presentados ayer cuentan con una autonomía de hasta 280 kilómetros, una tecnología que permite alcanzar una potencia de 136 CV y una capacidad de recarga de hasta el 80 % en media hora con supercargadores, unas instalaciones que a día de hoy no existen en Galicia.