Investigadoras de la Universidad de Vigo confirman que Marte fue habitable hace 3.500 millones de años

Celia Eiras VIGO

VIGO

Cedida

El estudio fue liderado por Elisabeth Losa-Adams y contó con la participación de otros científicos de la Universidad, así como de varios expertos de la NASA

02 jul 2021 . Actualizado a las 22:30 h.

Aún no se han hallado pruebas de una hipotética vida en Marte, pero sí se acaba de demostrar que este planeta reunió hace 3.500 millones de años las condiciones imprescindibles para albergarla. El proyecto de investigación fue liderado por la investigadora de la Universidad de Vigo Elisabeth Losa-Adams y participaron sus colegas universitarios Carolina Gil Lozano y Luis Gago Duport, así como varios expertos de la NASA (la agencia espacial de Estados Unidos).

En el artículo publicado en la revista británica Nature Astronomy, el equipo describe el estudio de la arcilla extraída del cráter Gale, recogida por el rover Curiosity (vehículo de exploración espacial) en 2016. Los sedimentos recogidos son muy semejantes a la glauconita, un mineral muy común en la Tierra que requiere unas condiciones ambientales estables durante un largo período de tiempo. No obstante, el actual clima de Marte se caracteriza por su extrema variabilidad de temperaturas.Por lo tanto, si bien a día de hoy es imposible la existencia de vida marciana, la aparición de la arcilla demuestra que sí lo fue en el pasado. 

Investigaciones anteriores han demostrado que el cráter Gale hospedó cuerpos de agua durante varios milenios. La presencia de este lago solamente pudo haber sido posible con un clima más húmedo que el actual. Ahora, según Losa-Adams, con este nuevo hallazgo se constata la existencia histórica de "procesos acuosos e condicións químicas que prevaleceron no tempo de formación" de la arcilla, mediante el estudio de los diversos cambios estructurales sufridos por el mineral a lo largo de los años. 

La demostración de una estabilidad ambiental confirma que hace aproximadamente 3.500 millones de años, el cráter contuvo un lago de "augas tranquilas con escasa sedimentación e unha lenta evaporación a baixas temperaturas", explica la investigadora del grupo Geoma (grupo de Geología Marina y Ambiental de la UVigo). Estas son, señala Losa-Adams, "condicións óptimas para a vida, tal e como as coñecemos hoxe en día". 

Sin embargo, el grupo incide en que este nuevo descubrimiento no se alza como una evidencia de que existió vida en Marte. El encargado de encontrar respuesta a esta gran incógnita será el rover Perseverance, que aterrizó en la superficie del planeta rojo en febrero, como parte del programa de exploración de Marte de la NASA.