La regente de un bar de Teófilo Llorente, al que implican en la aglomeración, solo admitió que el sábado por la tarde hubo mucha gente en la calle «disfrutando del buen ambiente y de mucho sol», pero niega que los agentes pusiesen multas a su establecimiento, en concreto. Atribuye la presencia policial a las denuncias presentadas por algunos vecinos contra otros bares de la zona pero no al suyo. «Es mentira que digan que hubo multas, la gente solo disfrutaba del sol», insiste.
Fiz admite que, en general, cada vez que se acumula gente, «hai alguén que se pon nervioso» pero que en este caso la preocupación le parece razonable: «O sábado isto estaba fóra de man polo local e na rúa, a unha hora na que os bares xa estaban pechados. Se eles seguen na rúa, non podes achacalo aos bares. Era unha rúa moi tranquila pero a afluencia de chavalada se acumula e os veciños teñen medo de que volva o problema do ruído».