El Sergas prepara una repesca para quienes no pudieron o no quisieron vacunarse

Ángel Paniagua Pérez
Ángel Paniagua VIGO / LA VOZ

VIGO

Oscar Vázquez

300 personas no recibieron ninguna dosis porque en su residencia había un brote y a 500 les falta la segunda; hay gente que no se pinchó y ahora sí quiere

02 feb 2021 . Actualizado a las 05:00 h.

Las enfermeras que recorren las residencias del área de Vigo vacunando contra el covid-19 a los usuarios y trabajadores concluyeron el domingo la primera fase. Pero no todo el mundo se ha vacunado. A corto plazo se harán dos planes de repesca.

Por un lado están los que no pudieron recibir el suero porque en sus residencias había brotes activas. Son 318 personas a las que ya no se puso la primera dosis y 525 a las que se pinchó la primera pero no la segunda, porque saltó algún brote en su residencia entremedias.

Son 800 usuarios o trabajadores de unos pocos centros sociosanitarios que estaban dispuestos a vacunarse pero que no han podido completar la pauta, según explica la directora de enfermería del área sanitaria de Vigo, Pilar Reza, encargada de coordinar el plan de vacunación, que advierte que las cifras son aproximadas. Para ellos, se activa ahora un plan de repesca. «Esta semana le vamos a dar un empujón», dice Reza.

Los equipos de vacunación recorrerán las residencias en las que no pudieron empezar cuando comenzó el plan, entre el 29 de diciembre y el 10 de enero. Tres semanas después, se pondrá la segunda dosis.

En cuanto a las residencias que sufrieron brotes después de la primera inyección, hay que esperar a que se cumplan los 21 días. Es un plazo ampliable. El día 8 coincide que están citadas más de 300 personas para recibir esta segunda parte del suero preventivo. Otras irán otros días. A los infectados solo se les puede administrar la vacuna cuando tienen una PCR negativa.

«Ha habido más rechazo entre los trabajadores de residencias que entre los usuarios», dice la directora de enfermería. Concreta que han notado más negativas en los centros públicos que en los privados. Estima que algunos de los que en principio no quisieron recibir el fármaco ahora sí estarían dispuestos, porque así se lo han transmitido. «Se van a volver a pedir los listados a las residencias, con los residentes nuevos, trabajadores nuevos o que estaban de baja, gente que renunció y ahora quiere...». Para ellos se hará otro plan de repesca, que no tiene que ver con la aparición de brotes en las residencias. «Nos interesa que se vacune todo el mundo», dice Pilar Reza.

Hasta el momento se han puesto 10.000 dosis del medicamento de Pfizer en las residencias del área de Vigo. Su inmunidad comienza siete días después de la segunda inyección.

Las tres semanas de diferencia entre dosis se cumplen entre el jueves y el domingo para los 4.351 profesionales sanitarios que ya recibieron la primera inyección. Ahora toca la segunda y la coordinadora del plan dice que se están ultimando los detalles para convocarlos estos días. Entre ellos hay 600 que recibieron la vacuna de Moderna, cuya segunda dosis puede esperar 28 días.