Salvaterra completa las termas de Oleiros con un área recreativa

María Jesús Fuente Decimavilla
maría j. fuente SALVATERRA / LA VOZ

VIGO

cedida

El complejo tendrá una extensión de 4.150 metros cuadrados

30 jun 2022 . Actualizado a las 19:08 h.

Siguiendo con el propósito de hacer de Salvaterra de Miño un municipio en el que primen grandes zonas medioambientales y de ocio, el Concello ha adjudicado las obras para la creación del área recreativa de Teáns, en la parroquia de Oleiros. La actuación, a la que se destinarán 23.262 euros, busca potenciar los lugares naturales situados dentro del espacio termal de Oleiros. Se trata de una zona de baños con cuatro pozas que se abastecen de un manantial de agua caliente captado en las inmediaciones del río.

Es el primer paso para emprender la regeneración de este sistema natural en la margen del río Miño al mismo tiempo que busca convertirse en un espacio de esparcimiento para los vecinos.

Con el desarrollo del área recreativa, que ahora se inicia, se busca un complemento a las pozas, ya que lo que pretende el Concello es implantar una parcela anexa de propiedad municipal convirtiendo todo el complejo en un área recreativa de 4.150 metros cuadrados.

Las acciones contempladas incluyen la pavimentación con arena, delimitación por medio de un bordillo en toda la zona, creación de un espacio verde y colocación de mobiliario urbano.

El proyecto está financiado a través de las ayudas no productivas vinculadas a la realización de actuaciones con objetivos agroalimentarios y climáticos de concellos integrados en la Red Natura 2000 de la Consellería de Medio Ambiente, Territorio e Vivenda.

 

XOAN CARLOS GIL

Forma

El complejo empezó a tomar forma hace apenas año y medio con la construcción de tres pozas de aguas termales al aire libre realizadas en piedra y con un tamaño medio de 140 metros cuadrados. Una cuarta construcción de menor tamaño incluye un decantador para las aguas, que finalmente van a parar al Miño.

En ese mismo lugar se conocía la existencia de una pequeña poza natural junto a un manantial utilizada por los vecinos de la zona, aunque con el tiempo se le perdió la pista.

Las aguas brotan a unos 40 grados , están catalogadas como termales y mineromedicinales y cuentan con informes del Instituto Geológico y Minero de España, así como de la Dirección Xeral de Energía e Minas.

Para la construcción de las pocas fue necesario contar con la autorización de la Confederación Hidrográfica Miño-Sil y la Consellería de Medio Ambiente.