La Policía Local no mide decibelios de fiestas en la pandemia desde hace un mes

J. R. VIGO / LA VOZVIGO / LA VOZ

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Los tres sonómetros están caducados y se enviaron a Madrid para homologarlos; solo dos agentes saben usarlos, pero están en el departamento de Tráfico y no hacen noches

10 dic 2020 . Actualizado a las 21:59 h.

Nuevo despiste de la Policía Local de Vigo a la hora de conservar un material tan costoso como sensible y útil para la ciudadanía. Ya ocurrió la semana pasada con una docena de coches oficiales, y dos furgones, con la ITV caducada que, al trascender, la jefatura de este departamento municipal se apresuró a corregir. Basta decir que todos los vehículos renovaron la ITV en una mañana y sin tener cita previa. Y todo ello tras más las quejas de los propios agentes que durante un mes alertaron a la jefatura de la situación sin encontrar respuesta. El nuevo olvido afecta a los tres sonómetros disponibles para medir decibelios y vibraciones. Una herramienta muy útil en tiempos de pandemia para constatar la celebración de fiestas al otro lado de paredes y puertas a las que no se puede acceder sin orden judicial previa. Pero que son muy molestas para la convivencia vecinal.

Dichos aparatos, también después de ser alertada la jefatura por sus agentes, se enviaron al Instituto Español de Metrología, en Madrid. También se puso sobre la mesa en una comisión información de seguridad, pero sin éxito. El medidor que más tiempo lleva en desuso es el que entró empezó el 7 de junio -las homologaciones son anuales-, mientras que los otros dejaron de estar operativos el 11 y el 30 de octubre. Se entiende que a lo largo de todas esas semanas no se utilizaron, en las que cerró la hostelería y las parrandas en viviendas se dispararon, los agentes que acudían a cada reclamación vecinal no tenían forma técnica que demostrar en decibelios la intensidad de cada juerga a fiscalizar.

Resulta igualmente sorprendente que solo dos agentes de la Policía Local tengan el curso de más de 30 horas necesario para utilizar estos aparatos. Y sobre todo, llegada la vía judicial, puedan prestar declaración como testigos haciendo de peritos. Son causas que se tramitan por lo civil, y casi nunca llegan a lo penal. Pero la figura del agente perito resulta igual de importante para atestiguar, en un pleito entre vecinos por ruido, que la mediación se hizo según la norma y es válida para aportarse como prueba al procedimiento.

Palabra de Luis Espada

Hasta el profesor Luis Espada en una de sus últimas publicaciones -titulada Gestión de la contaminación acústica: análisis de la legislación estatal y propuestas de aplicación para la administración local- es muy tajante al relatar el escenario actual en la ciudad que lo adoptó hasta convertirlo en profesor emérito de la Universidad de Vigo y Valedor do Cidadán: «Aún no se adecúa [la normativa acústica municipal] al marco jurídico de la legislación básica del Estado en lo que respecta a aspectos como la fijación de objetivos de calidad acústica para cada tipo de área acústica y para el interior de las edificaciones, los límites de emisión e inmisión y procedimientos de medición y evaluación del ruido y vibraciones», según expresa en dicha publicación.

El Concello procederá el jueves de la semana que viene a las ocho de la tarde al acto de encendido de las luces de Navidad. El alcalde, Abel Caballero, explicó ayer que el acto será presencial junto al árbol gigante instalado en la calle Policarpo Sanz. Sin embargo, la presencia de personas será mínima. No se contempla que haya público para respetar así las medidas de seguridad sanitaria impuestas por la pandemia del covid-19.

Abel Caballero afirmó que «será sin apertura generalizada y libre al público, habrá representantes de asociaciones culturales y vecinales en número muy limitado, sentados y con control absoluto de aforo», señaló ayer el regidor. Además, destacó que el Concello establecerá una serie de medidas especiales en materia de tráfico y seguridad durante la temporada de Navidad para poder cumplir con las normas sanitarias. Desde el 3 de diciembre y hasta el 10 de enero la circulación quedará cortada en zonas del centro de la ciudad entre las cinco de la tarde y las once de la noche. Con todo, se respetará el acceso rodado de los vecinos a sus domicilios, a una velocidad máxima de 10 kilómetros por hora. También se favorecerá la prestación del servicio de transporte público urbano.

Plan de tráfico

Los cortes de tráfico se llevarán a cabo en el Paseo de Alfonso XII, Elduayen , Porta do Sol, Policarpo Sanz, Darío Álvarez Blázquez, Reconquista entre Marqués de Valadares y Policarpo Sanz, Velázquez Moreno entre Príncipe y Marqués de Valadares, Colón, Urzaiz entre Gran Vía y Colón, Gran Vía ascendente entre Urzaiz y María Berdiales, Hernán Cortés entre Urzaiz y María Berdiales, Doctor Cadaval desde López de Neira hasta Porta do Sol y Uruguay desde Cervantes hacia Gravina.

La calle Colón será de uso exclusivo de residentes, aparcamiento y transporte público. La calle Velázquez Moreno entre Marqués de Valadares y Policarpo Sanz cambia el sentido de circulación hacia Policarpo Sanz.

Se establece un sentido de circulación de la calle Uruguay hacia Cervantes desde la calle Gravina. La calle Cervantes mantiene un solo carril abierto para uso exclusivo de residentes, aparcamiento y transporte público.

Se abre un carril pegado al bulevar y en sentido ascendente en la Gran Vía entre Urzaiz y Brasil para uso exclusivo del autobús urbano. Se establece un doble sentido de circulación para residentes en la calle Hernán Cortés, entre María Berdiales y Urzaiz.

Se recomienda utilizar desvíos desde Beiramar, los túneles, la plaza de América para evitar pasar por el centro de la ciudad. El Concello reforzará el transporte público para evitar el uso de vehículos privados.