Urgen a crear brigadas policiales en Vigo contra los ciberdelitos, en auge desde el estado de alarma
VIGO
El sindicato policial SUP presentará este miércoles un curso formativo a agentes ante el aumento de ataques más complejos
06 oct 2020 . Actualizado a las 13:59 h.El Sindicato Unificado de Policía (SUP) ha pedido brigadas especiales en Vigo y el resto de las comisarías para frenar los ciberdelitos, en auge desde la declaración del estado de alarma por el covid-19, el 14 de marzo. Desde entonces, la policía ha detectado un aumento de los delitos informáticos que, según el SUP, ha desembocado en un notable incremento de las denuncias de los últimos meses. Cree que los agentes deben adaptar sus conocimientos en esta materia, considerada estratégica. Es la misma tesis que mantiene la Fiscalía, que aboga por formar a los equipos de investigación tecnológica.
El sindicato presentará este miércoles un curso de 20 horas mediante videoconferencia para agentes de la Policía Nacional en la sede del SUP, en la calle Benito Corbal, en Pontevedra. Será impartido por Cyber Security Management en Galicia. Cuenta con la homologación provisional de la Academia Galega de Seguridade Pública (Agasp).
El SUP reivindica la creación en Vigo y el resto de las comisarías de grupos especializados que puedan luchar con medios y formación específica contra la amenaza de los delitos cometidos a través de Internet. Según indican, en los últimos años se ha registrado un aumento de ataques cada vez más complejos con una creciente profesionalidad de los cibercriminales.
Los agentes reconocen que debido a que el software malicioso es muy sofisticado no es posible aplicar acciones de defensa o buscar los orígenes de los ataques.
Alerta de la Fiscalía de Pontevedra
La Fiscalía de Pontevedra resalta en su memoria del 2019 la importancia de las conductas originadas en las redes sociales y las diversas situaciones de riesgo, tales como el registro del usuario, la indexación automática de los perfiles, los contenidos publicitarios que utilizan la información de los usuarios o la cesión de los derechos de propiedad intelectual.
También alerta de la existencia de amenazas basadas en el código malicioso que se difunde en las redes sociales, la suplantación de identidad, la recepción de comunicaciones sociales no solicitadas, el phising (técnicas engañosas para ganar la confianza de la víctima y conseguir que realice acciones que no debería realizar, como dar sus datos bancarios), el pharming (redirigir el nombre de dominio de una entidad de confianza a una página web falsa creada para obtener datos de la víctima), el sexting (envío de mensajes de contenido sexual), y el acoso o ciberbullyng.
La Fiscalía señala que la situación penal de todos ellos entiende que tiene que ser la propia de los delitos contra la libertad sexual, la intimidad y la pornografía infantil, contra la integridad moral, acoso y chantaje.
La Fiscalía también alerta, por último, del happy slapping (agresiones a otros colgándolas en plataformas como Youtube), que pueden encajar en los delitos contra la integridad moral o el descubrimiento y revelación de secretos.
El Ministerio Público lamenta las dificultades para fijar la competencia territorial, de identificación del autor y partícipes, la ocultación de mensajes o archivos y la formación necesaria de equipos de investigación tecnológica.