Comesaña elige a un hombre de su confianza, hasta ahora número dos en Ourense, para ocupar la plaza que él dejó vacante
22 sep 2020 . Actualizado a las 09:11 h.El nuevo gerente del área sanitaria de Vigo es Javier Puente, un hombre que ya conoce profundamente la sanidad de Vigo, porque tuvo puestos directivos en ella. Puente, de 61 años, era hasta ahora el director asistencial de Ourense (el número dos del área sanitaria). Había llegado allí de la mano de Julio García Comesaña cuando este asumió la gerencia de Ourense, hace tres años. Comesaña es ahora conselleiro y pone de gerente en Vigo a Puente, un hombre de su máxima confianza. Dirigirá la institución pública con el mayor presupuesto de Vigo, 790 millones de euros (el Concello tiene 265).
Julio García Comesaña se lo ha presentado esta mañana a los jefes de servicio y a la junta de personal en el Hospital Álvaro Cunqueiro, junto con el gerente del Sergas. Comesaña era el anterior gerente del Sergas en Vigo y su cargo estaba vacante desde hacía 16 días, cuando él ascendió a conselleiro de Sanidade. Ahora es el único responsable de nombrar al gerente y, tras dos semanas con la plaza vacante, escoge a Javier Puente, que ya fue director de los hospitales de Monforte y Verín y ha tenido varios puestos en la gestión sanitaria. Su elección evidencia que el máximo responsable de la sanidad gallega va a seguir muy pendiente de todo cuanto ocurra en la sanidad de Vigo.
Puente, además, fue uno de los fichajes de Félix Rubial, con Julio Comesaña, cuando los jefes de servicio del hospital pidieron la cabeza de toda la dirección semanas después de la apertura del Hospital Álvaro Cunqueiro, en noviembre del 2015, a raíz de los problemas de la puesta en marcha del centro sanitario.
El nuevo gerente tendrá un reto triple. Uno es mantener la atención al covid en unos estándares que gozan del respeto profesional, porque en Vigo no ha habido grandes problemas de transmisión ni de recursos hospitalarios, y porque se ha mantenido una importante coordinación entre los distintos servicios del hospital y con los centros privados de la ciudad.
Otro reto es recuperar toda la actividad que se perdió por la crisis del coronavirus. La lista de espera quirúrgica empezaba a enderezarse (según los datos oficiales), pero la pandemia lo trastocó todo y los hospitales dilucidan aún cómo seguir atendiendo el coronavirus sin tener que paralizarse otra vez. Esto sucede en un momento en el que la transmisión del virus no deja de crecer en el área de Vigo.
El tercero es la crisis de atención primaria, que nunca se cerró. Julio García Comesaña llegó a la gerencia en julio del 2019, cuando el entonces conselleiro de Sanidade, Jesús Vázquez Almuiña, relevó a Félix Rubial como gerente de Vigo porque la crisis de la atención primaria y las protestas de los médicos no cesaban, después de más de ocho meses y a un año de las elecciones autonómicas. En un primer momento, Comesaña atemperó las protestas. Pero, a falta de medidas que curasen el problema de raíz, en los centros de salud se estaba gestando una nueva arremetida. El covid lo paralizó todo, pero el problema de fondo sigue sin resolverse.
