El juez decretó la prisión provisional comunicada y sin fianza. Las víctimas acudieron a mediar con unos ocupantes ilegales de un edificio de la avenida de Castrelos que molestaban a una amiga
09 sep 2020 . Actualizado a las 01:37 h.La Policía Nacional de Vigo ha detenido a un okupa vigués de 19 años por darle una paliza con un tubo de hierro a una pareja y enviarlos al hospital. Le atribuyen un delito de lesiones. Las víctimas quedaron tiradas ante el portal y, tras ser atendidas en una ambulancia, fueron ingresadas en el Hospital Álvaro Cunqueiro.
El juez investiga al presunto agresor por dos delitos de lesiones con instrumento peligroso. Una de las víctimas está con pronóstico grave, aunque en principio no se teme por su vida. El juez decretó la prisión provisional comunicada y sin fianza.
Él sigue ingresado en estado grave, por contusiones graves en la cabeza. Su novia contó a la policía que fueron agredidos con una botella y el agresor dice la versión contraria, que las armas las llevaban ellos y él se limitó a arrebatarles esos objetos y defenderse.
Por su parte, el implicado alega que la pareja iba armada, ella con una botella y él con un tubo de hierro, y que él se defendió. El supuesto agresor mantiene que al novio se le cayó el tubo de hierro y él lo recogió del suelo y lo usó para defenderse.
La agresión fue el lunes a las 5.00 horas. La pareja fue a un edificio de la avenida de Castrelos para hablar con unos okupas que vivían en un ático y amenazaban desde hacía tiempo a una amiga, residente en el mismo inmueble. Mientras esperaban a que estos bajasen, la pareja fue atacada por sorpresa y golpeada con gran violencia. Todo apunta a que el arma usada fue un palo o un objeto contundente similar. Horas más tarde los agentes detuvieron al sospechoso, que acumula cinco arrestos anteriores.
Según la joven, que salió mejor parada que su novio, al llegar al portal llamaron y les pidieron que bajasen. Mientras esperaban, ella sintió un fuerte golpe en su cabeza y se desplomó, no logrando recordar mucho más, salvo que su pareja estaba tendida y que ambos recibían patadas en el cuerpo y la cabeza. Un testigo vio a las dos víctimas desplomadas en el suelo y alertó a la policía. El hombre había recibido un fuerte golpe en la cabeza y la mujer, diversas contusiones.
El chico sigue hospitalizado y el titular del Juzgado de Instrucción número 8 de Vigo, en funciones de guardia, estaba esta mañana a la espera de recibir el informe del parte médico para decidir si envía a prisión al okupa, el cual está en los calabozos del juzgado.
