Las restricciones en el acceso a las playas contribuyó al bajón estival
05 sep 2020 . Actualizado a las 01:53 h.El servicio marítimo entre O Morrazo y Vigo cayó un 30 % este verano, pero el flujo no se trasladado a la carretera. De hecho y, pese a cumplir un año en servicio, el número de vehículos que han circulado durante la época estival por la autovía de O Morrazo (AG 46), han caído también frente al año pasado. Hay un descenso de un 6 % que se incrementa hasta el 8 en el tramo de la salida a Cangas, que es la VG-45. Posiblemente el desfase se debe a las restricciones de tráfico que impuso este año Cangas a sus arenales y que, aunque desataron una gran polémica, acabó siendo una medida de control de aforo tan útil como cualquiera. «Puede ser muy mejorable, pero el sistema funcionó y se evitaron masificaciones», señala la concejala de Turismo Aurora Prieto. Reconoce
que ha sido un agosto «flojo» para la hostelería, como en otros muchos municipios costeros y confirma el bum de las viviendas turísticas. «La ocupación de estos alojamientos ha superado el 80 % y hay clientes que ya han dejado hecha la reserva para el año que viene», señala la edila. Los datos de la Consellería de Mobilidade e Infraestructuras reflejan otro dato curioso porque en agosto hubo menos tráfico en la autovía que en julio. Se rompe la estadística de toda una década, ya que agosto fue siempre el del veraneo por excelencia en las playas morracenses con continuos atascos. En agosto circularon 58.310 vehículos por la AG-46 frente a los 62.423 que lo hicieron en julio. La restricción de tráfico fue sin embargo, a juicio del PP, «chapuceira e discriminatoria». «Se a Policía Local tramitou 550 multas nas praias e só 130 por acceder sen permiso, podemos deducir que o 75% foron por estacionamento», dicen.