«Mi lesión no se opera y es un tira y afloja continuo con mi cuerpo»

VIGO

CEDIDA

Sigue en activo pese a que varios médicos se lo desaconsejaron hace años

24 ago 2020 . Actualizado a las 05:00 h.

Marta Canella (Baiona, 1995) vestirá la próxima temporada por segundo año la camiseta del Barça de baloncesto femenino. Será la cuarta campaña desde que los médicos le detectaron una condromalacia -falta de cartílago- de grado 4 en las dos rodillas y le aconsejaron dejar el deporte que practica desde muy niña. Decidió apostar por la continuidad y, gracias a eso, sigue disfrutando en las canchas. Asegura que tiene cuerda para rato.

-¿Qué balance hace del primer año en Barcelona?

-Es bueno, por eso repito, pero a nivel de equipo no salió como esperábamos. Empezamos bien y tuvimos un par de meses malos, enero y febrero. Cuando comenzábamos a remontar, vino el parón del covid y la sensación es como si lo fuera a coger por primera vez.

-¿Qué le llevó a apostar por este club hace un año y a renovar ahora?

-Es un proyecto ambicioso, planteado en serio para intentar ascender aunque luego pueda salir o no. Y quiero compaginarlo, como siempre, con los estudios. Este curso era de transición, fin de carrera y máster o prácticas. Para eso en Barcelona hay muchas más posibilidades, mucha más oferta que en casi cualquier otra ciudad, por eso era una opción buena para compaginarlo.

-¿Le ha resultado fácil sacar adelante los estudios mientras practicaba baloncesto?

-Como la mayoría de jugadoras, no he conocido otra cosa. Desde que estaba en la ESO, la rutina era ir a clase, llegar a casa, estudiar o hacer los deberes y luego entrenar, así cada día. El fin de semana, más de lo mismo y si quedaba tiempo, ocio. Si te organizas lo hay, no es ninguna cárcel. Solo tuve problemas con el traslado de expediente de Vigo a León, que me retrasó un año, pero fue el precio que hubo que pagar.

-También es ya algo cotidiano para usted jugar con dolor por sus problemas de rodillas. ¿Cómo lo ha llevado este curso?

-Es una lesión que no tiene operación para un deportista y he ido aprendiendo a convivir con ello. En la etapa de León (estuvo dos años en el Aros) me ayudaron mucho a nivel de medios y también a saber yo misma cuándo estoy bien, cuando puedo hacer unas cosas y otras. Es como un tira y afloja con tu cuerpo. Me ha tocado esto y no tiene solución, pero creo que llegado un punto todas tenemos nuestras historias de lesiones. Es algo que va con el deportista, me lo tomo así para poder con la lesión y que ella no pueda conmigo.

-¿Está estable o va a peor?

-No, lo bueno es que no noto que cada año me encuentre peor. Al contrario, si físicamente doy un poco más con la tecla, estoy mejor, y si no, igual, que ya es bastante. No he tenido que volver a parar, la lesión más reciente fue el hombro. No supe que me lo había roto hasta el verano y lo aproveché para rehabilitarlo ahí. Tuve bastante suerte.

-Tiene que tener mucha resistencia al dolor.

-Al final es como lo que decía de los estudios: lo de las rodillas me tocó tan pronto que casi no he conocido otra cosa en edad adulta. Ojalá no lo tuviera y seguramente sería mucho más fácil, pero para mí es lo normal.

-¿Le han vuelto a aconsejar que deje el baloncesto?

-Sí, hubo un punto en León en que me vio otro médico y me dijo lo mismo. Pero ese doctor siguió conmigo hacia adelante y me ayudó mucho. Su recomendación era no seguir, pensaba que con una lesión así, el baloncesto era lo último que debía hacer, pero vio que podía y al final los que decidimos somos nosotros, los deportistas. Yo decidí, él me ayudó y salió muy bien.

-Cuando le desaconsejan seguir, ¿se lo replantea?

-En el momento sí te hacen dudar, porque te lo dice una persona con mucha experiencia y conocimiento sobre el tema. Pero lo tuve claro porque yo soy la que veo que me duele pero puedo.

-¿Juega siempre con dolor?

-No tengo dolor diario, pero el runrún de la molestia sí está. Es más después del partido que durante. Con la adrenalina, mientras juego casi siempre me olvido.

«La vuelta del deporte, comparada con el cole, me parece una nimiedad»

Canella lleva un mes teletrabajando en Vigo tras el confinamiento en Barcelona. En unos días regresará para comenzar la pretemporada, con la incertidumbre de cómo será la vuelta.

-Primero se fue de Erasmus a Bélgica y tras su paso por León, está en Barcelona. ¿Se ha acostumbrado a estar lejos de casa?

-Conforme pasan los años, cada vez se echa más de menos. Al principio siempre queremos irnos y luego queremos ir tirando de vuelta. Llevo un mes teletrabajando desde casa de mis padres, en Baiona, y estoy encantada.

-¿Cómo vivió el confinamiento en Barcelona?

-Estuve allí los tres meses que no se pudo salir, respetando las normas y bien. En mi casa estaba a gusto, no lo llevé mal. Seguía estudiando el máster y no me puedo quejar. Toda mi familia y mis amigos estaban bien, todos sanos, y eso me hacía estar más tranquila. Era una suerte que hay que valorar.

-¿Tiene fecha para volver?

-En principio el inicio de la pretemporada es el 15 de septiembre, seremos de las que más tarde empecemos, pero supongo que es para ir viendo cómo va la cosa y cómo responde todo el mundo.

-¿Siente incertidumbre por la vuelta a las canchas?

-Lo comparo con la vuelta al cole que tanto se habla estos días y al lado de eso, me parece una nimiedad entre comillas. Al final, todo es relativo. Para mí el baloncesto es importante, pero a nivel global hay otras cosas que van primero. Siento incertidumbre, pero a la vez pienso que si se puede y tiene que ser, será, y si no esperaremos.

-¿Qué le parece la nueva composición de la Liga?

-Creo que pierde nivel y que va a haber dos mundos diferentes, pero es lo que toca y, como siempre, hay que jugarlo.