Apamp pide la reapertura de sus centros de día y ocupacionales para evitar el aislamiento social
VIGO
Las personas con parálisis cerebral precisan servicios muy especializados
07 jun 2020 . Actualizado a las 14:09 h.La asociación de familias de personas con parálisis cerebral Apamp está preocupada por la decisión de la Xunta de no abrir los centros de día y ocupacionales de atención hasta el 1 de septiembre. Con el estado de alarma, a mediados de marzo se clausuaron las instalaciones de Aspace en toda Galicia. Desde entonces, las familias han asumido una sobrecarga de cuidados que «a día de hoy está pasando factura en el ámbito emocional y en el físico. Se han quedado sin recursos de atención, para sus hijos yfamiliares y para ellos (respiro familiar, grupos de familias…)».
«El hecho de que este cierre se prolongue hasta septiembre agudizará más esta situación. Es importante tener en cuenta que nuestros centros no solo prestan cuidados sino que, a través de sus servicios especializados de fisioterapia, logopedia, psicología, ocio, formación, terapia ocupacional… favorecen el mantenimiento y la dimensión social de las personas con parálisis cerebral», añade Inés Gómez, responsable del departamento de comunicación de Apamp. «Nos preocupa que debido a la prolongación de esta situación se pueda provocar el aislamiento social de las personas con parálisis cerebral y la interrupción de una serie de servicios que son vitales para evitar el deterioro físico, psíquico o cognitivo y garantizar su calidad de vida», añade.
Desde la asociación son conscientes de que los centros de día y ocupacionales no podrán reiniciar su actividad en las mismas condiciones que antes del estado de alarma, y que hay que hacerlo garantizando la seguridad de las personas con parálisis cerebral y los profesionales con una apertura gradual, reduciendo el aforo y atendiendo las necesidades más urgentes.
Apamp recogió las demandas del colectivo en un documento que han remitido a la Consellería de Política Social. En él expresan sus opiniones familiares y usuarios como Adolfo Comesaña, que señala: «Me doy cuenta de que ni yo ni mi rutina ni la de mis compañeros es importante para ciertas cabezas pensantes. Igual se creen que con pasarme la pensión el día 1 de cada mes tengo suficiente; que les quede claro que quiero volver a mi vida aunque para ellos no sea importante».