¿Cómo les fue la primera semana de reapertura?

Begoña Rodríguez Sotelino
b. r. sotelino VIGO / LA VOZ

VIGO

XOAN CARLOS GIL

El restaurante Niño Corvo y la peluquería So Chic, algo aliviados, cogen el ritmo a tareas que ya no son lo mismo

09 may 2020 . Actualizado a las 05:00 h.

Solo han pasado cinco días desde que algunos negocios han podido reanudar su actividad. Las peluquerías, con cita previa y los restaurantes, solo para llevar comida a domicilio o que el cliente la recoja en el propio local. Carolina Lagoa, de So Chic (Álvaro Cunqueiro, 11) lo ha vivido con intensidad y ha comprobado que todo se ha hecho «un poco más complicado, pero ni tan mal, me voy acostumbrando», dice la peluquera que como cuenta, le va cogiendo el truco al nuevo ritual de desinfectar con lejía y con alcohol cada vez que entra un nuevo cliente, utensilio por utensilio. «Pero ya he cogido rapidez. Puedes tardar diez o quince minutos más con cada uno, es un tiempo que antes aprovechabas para ponerte ya con otro cliente, pero ahora es así», lamenta. Carolina explica que está atendiendo a una media de 7 personas por día y no tiene citas libres hasta el 21 de mayo. Está entrando a las 8.30 de la mañana y yéndose a las 11.30 de la noche. Lo que peor lleva es trabajar con mascarilla y pantalla protectora, que es «agobiante», y percibe el miedo. Algún cliente que le han pedido que se cambiara de guantes dos veces. Todos deben ir protegidos con guantes y mascarilla que deben traer o si no, se los proporciona, limpia sin parar, pero ni así llega.

XOAN CARLOS GIL

Por su parte, Adrián Albino, chef del restaurante Niño Corvo, afronta atareado su segundo fin de semana largo, ya que por ahora solo cocina de jueves a domingo. Y para estos días ya no admite más reservas, entre 7 y 8 al día, porque están completas. «Estoy anotando a los del fin de semana que viene», advierte.

El cocinero está tan contento con la experiencia que cuando la actividad del restaurante se normalice, piensa continuar tanto con el servicio a domicilio como el de recogida en el local. «Muchos prefieren que se lo lleve porque no está claro si pueden desplazarse a más de un kilómetro. También seguirá con el remate de los platos en casa por parte de los clientes: «Ha tenido éxito, a la gente le gusta interactuar», confirma.