Posible reducción de los viajes a las Cíes y aforo sin concretar

e. v. pita VIGO / LA VOZ

VIGO

CARLOS IGLESIAS

Las navieras impondrán distancias de 1,5 metros entre pasajeros

07 may 2020 . Actualizado a las 05:00 h.

Muchos vigueses sueñan estos días con veranear en las islas Cíes y disfrutar de su playas sin soportar la avalancha de visitantes, disuadidos de viajar por la alarma por el covid-19. La reapertura de este parque natural plantea, a día de hoy, múltiples incógnitas. Las autoridades no han perfilado ni el aforo ni las medidas de seguridad e higiene que deberán adoptar los pasajeros en la travesía y al desembarcar en el muelle de la playa de Rodas. También se desconoce si los visitantes podrán alojarse en el cámping ni qué precauciones deberán mantener en las tiendas. Lo mismo para los bañistas que se tumben en sus arenales.

Lo que parece evidente es que este verano habrá una reducción de visitas a la joya viguesa del Parque Nacional das Illas Atlánticas y que no alcanzará las 300.000 visitas anuales aunque se estire la temporada hasta octubre como en el 2019. Las autoridades aún no han concretado el aforo, que en los últimos años se recortó a 1.800 pasajeros diarios, 550 campistas, 400 de grupo y 150 de fondeo. En el caso de Ons, el tope es de 1.300 visitantes al día y en Sálvora y Cortegada, de 250. Aunque se mantengan los cupos, habrá reducción, en la práctica, por motivos logísticos, ya que algunas navieras admiten que no llenarán sus barcos porque a bordo establecerán medidas de separación entre pasajeros para evitar contagios.

«Estamos esperando el desarrollo de un protocolo de higiene y seguridad para el turismo y el transporte. No sabemos fechas, aforo ni medidas para Cíes. Es importante que nos den una fecha con antelación para prepararnos para ello», dice la portavoz de Nabia, María Jesús Acuña. Esta naviera da por hecho que los pasajeros a las Cíes deberán llevar mascarilla y guardar metro y medio de distancia entre sí, viajar al aire libre en cubierta o, abajo, con las ventanillas abiertas. La tripulación irá protegida con epis. Se extremará la limpieza. Estas medidas ya se aplican en el transporte marítimo de Vigo a Cangas y Moaña y han reducido la capacidad de los barcos. Cuestionan el uso de cámaras de temperatura en el embarque porque no filtrará a los asintomáticos.

Por su parte, la Consellería de Medio Ambiente ha pedido por carta al Ministerio de Transición Ecológica y Reto Demográfico que concrete el aforo máximo permitido en las islas y ha preguntado por los criterios que se seguirán de cara a organizar las visitas al parque nacional. La conselleira Ángeles Vázquez recordó que la Xunta ya tiene un plan rector de usos y gestión con cupos pero quiere que el Gobierno le precise cuántos visitantes están autorizados en la fase I de la desescalada, que permite grupos reducidos en los parques naturales. Requiere otra concreción para la fase II, en la que se ampliará el número de visitantes a los espacios protegidos y para la III, en la que se autorizará el turismo y la movilidad.

«No llama nadie»

Tras la declaración del estado de alarma por el covid-19, la Xunta desactivó la aplicación informática para autorizar las visitas a las Cíes. Una vez se permitan, la reactivará con las plazas que se oferten y organizará y controlará el transporte marítimo.

A solo seis semanas del inicio de la temporada de verano, en la naviera Nabia no están recibiendo llamadas de posibles clientes para interesarse por los viajes a las Cíes. «No llama nadie, muy poco», dice la portavoz María Jesús Acuña. Lo que más le interesa a la naviera es que las autoridades concreten los requisitos y condiciones de acceso a la isla en la fase III porque autoriza el turismo. Echan de menos que la Administración les contacte.

Nadie sabe cómo van a evolucionar las fases y todos esperan a lo que digan tres ministerios.