Rubén Nóvoa
La crisis del coronavirus ha provocado que la compañía textil ourensana Adolfo Domínguez se vea obligada a activar un ERTE para 728 profesionales, toda vez que se vio obligada a cerrar todas sus tiendas en España al ponerse en marcha el estado de alarma. "La protección de nuestros clientes y profesionales es nuestra máxima prioridad. Reforzamos áreas que nos permiten ser lo más rentable posible hasta que podamos reabrir nuestras tiendas y volver a la actividad habitual", explicó Antonio Puente, director general de Adolfo Domínguez. En esta línea, la compañía ha reforzado su servicio de venta en línea, al mismo tiempo que mantiene abiertos puntos de ventas en 16 países, con un total de 186 negocios.