El técnico destaca que su equipo está en el mejor momento de la temporada, aunque con margen de mejora
10 mar 2020 . Actualizado a las 05:00 h.Quique Domínguez insiste en que el Novás aún no está salvado, pero tampoco niega que no solo no está lejos esa meta, sino que también ven la fase de ascenso cerca. El entrenador destaca la gran competitividad de la liga y lo mucho que queda por remar.
-¿Qué balance hace de lo que va de temporada?
-Está siendo dura para todos los equipos menos para el Cisne. El resto nos jugamos mucho en cada partido, hay mucha igualdad. Este año son cuatro equipos los que se pueden ver implicados en el descenso y la permanencia está cara. La rivalidad es enorme y en eso estamos también.
-¿No ve la permanencia ya encarrilada?
-Estamos en ello. Con nueve partidos por delante, todavía hay muchos equipos con ese mismo objetivo de poner distancia con esa zona. Hemos abierto un pequeña brecha, pero no es nada definitivo y tenemos que seguir dando pasos y jugar cada partido con la seriedad que lo estamos haciendo. La concentración y las ganas de sumar son nuestras grandes virtudes.
-¿La fase de ascenso no es el objetivo del equipo a día de hoy?
-Lo primero es asegurar la permanencia, es la meta que se marcó el club después de que costara tanto y lograrlo a última hora la temporada pasada. Queríamos sufrir menos y estamos en ello, pero hay que consolidarlo. Acabamos de conseguir una victoria importante y tenemos un partido ahora en casa contra el Zamora, que está por detrás, y abriríamos otra pequeña brecha.
-¿Ve posible meterse en la fase?
-Hay que ser ambiciosos y querer estar lo más arriba posible. No tenemos muy lejos al Alcobendas, a un punto aunque con un partido menos, y si se ponen a tiro, lógicamente es indudable que vamos a ir a por ello. Pero nuestro ánimo no es tanto dar caza al Alcobendas como terminar lo más arriba posible. Estamos ya en el tramo final de liga y todo tiene una trascendencia mayor. Cada partido es clave, los estados de ánimo influyen y el nuestro es bueno, de confianza. Queremos alargarlo y aprovecharnos de la buena dinámica en la que estamos.
-¿Considera que es el mejor momento del equipo?
-Creo que sí, por los resultados y la inercia. En el juego seguimos un poco irregulares. Seguimos teniendo momentos muy buenos y otros en los que cometemos errores evitables con los que damos balones de oxígeno al rival, pero forma parte del juego. Los entrenadores queremos que todo sea perfecto y la realidad no siempre es así, pero es cierto que estamos en un buen momento, llevamos tiempo sin perder, vemos a los equipos de arriba de cerca y eso te hace estar con más ánimo y confianza y aspirar a objetivos un poco mayores.
-¿Cómo ha ido evolucionando el Novás en estos meses?
-Nuestro equipo conservaba la mitad de la plantilla y el resto eran nuevos, como el entrenador. Sabíamos que iba a llevar tiempo e iba a haber dificultades, que no estábamos por debajo de nadie, pero tampoco por encima. En la primera vuelta, con un calendario difícil, hubo partidos en casa en los que no estuvimos a la altura que nos gustaría. Hubo derrotas que nos pesaron, pero fuera el equipo siempre ha mostrado un gran nivel y ha conseguido muchos puntos, algo que no es fácil en esta categoría y que hay que valorar.
-¿Fue un acierto volver a Galicia?
-Sí, estoy cómodo y a gusto, en un club que es consciente de sus límites y, dentro de esas posibilidades, hace las cosas con criterio, con calma y queriendo dar pasos sólidos y consistentes, no aventuras que puedan pasar factura en el futuro. Estoy identificado con esa idea e intento aportar mi granito de arena.
-¿Puede pensar el Novás en Asobal a largo plazo?
-Siempre se puede pensar, pero estamos lejos. Siempre es un aliciente tener un objetivo grande, pero hay que dar los pasos correctos, con paciencia como se están haciendo las cosas aquí.