Las salas de familia revisan también más peticiones de rebajar la pensión a los hijos
15 feb 2020 . Actualizado a las 22:14 h.En pleno día de San Valentín, los tres jueces de familia de Vigo tramitaban en sus despachos una montaña de expedientes de divorcio, separaciones y rupturas de parejas de hecho. Fuentes jurídicas admiten que estos tribunales están «atascados» a causa de estos litigios que siguen cuando se apaga el amor, cada vez más. «Hay muchos divorcios, modificaciones de medidas e incapacidades. Este año están entrando muchas demandas», afirman fuentes judiciales. Las estadísticas revelan que el total de estos asuntos relacionados con las rupturas familiares se han disparado un 7,7 % en el último año.
Fuentes jurídicas aseguran que las más afectadas son las salas más antiguas de Vigo (Primera Instancia número 5 y número 12) porque «arrastran» todas las ramificaciones de los procedimientos y, además, deben ejecutar cobros y liquidaciones de pensiones de alimentos durante décadas. A los heredados, se suman los nuevos pleitos entrantes.
En el 2018, estas rupturas generaron 1.220 litigios. Aquí se contabilizan 597 demandas de divorcios y 173 de rupturas de parejas de hecho (more uxorio, en argot jurídico), generalmente las que tenían hijos en común. Fueron 770 demandas en total, a las que se añadieron 268 solicitudes de modificaciones de medidas que presentaron los separados para reducir la cuantía de la pensión a los hijos o la exmujer o cambiar su régimen de visitas. También pidieron 182 solicitudes de medidas provisionales para fijar la casa de los hijos hasta el juicio.
Un año después, en el 2019, se alcanzaron los 1.314 casos. Incluyen 596 divorcios, 216 rupturas de pareja de hecho, 290 modificaciones de medidas y 212 medidas provisionales. En total, estos pleitos de rupturas subieron un 7,7 % en un año y las modificaciones de medidas, un 16,4 %.
Además, hay que sumar un centenar de causas civiles en el Juzgado de Violencia sobre la Mujer en Vigo, que se encarga de tramitar el divorcio y las medidas provisionales a la maltratada.
Las quiebras familiares también movilizan a los abogados de oficio. En el 2019, el Colegio de Abogados aceptó 911 peticiones de justicia gratuita para que letrados del turno tramiten divorcios y modificaciones de medidas. En el 2018, fueron cien menos.
Los juzgados de familia tienen otro frente abierto: las declaraciones de incapacidad de ancianos. Los jueces acudieron a 245 revisiones en asilos en el 2016 y la cifra ha ido en aumento hasta los 285 del 2019. Cada año más, por el envejecimiento poblacional.