Dos directivos de Ribera Salud tendrán el control empresarial
31 ene 2020 . Actualizado a las 05:00 h.El Hospital Povisa ha dejado de tener un consejo de administración que actúe como principal órgano directivo de la empresa. El grupo valenciano Ribera Salud, dueño del centro sanitario vigués desde el mes de diciembre, decidió suprimirlo y así se acordó en la reunión de la junta de accionistas del hospital que se celebró esta semana.
Ahora, en lugar de existir un órgano colegiado, el gobierno societario de Povisa estará formado por dos administradores, que tendrán que actuar de forma mancomunada. Se trata de una figura legal que obliga a que las decisiones vayan firmadas por las dos personas. Según una portavoz del Grupo Ribera Salud, estos dos administradores serán Alberto de Rosa y Pablo Gallart. El primero es el consejero delegado del grupo sanitario valenciano y el segundo es su director financiero.
De esta manera, el control operativo del hospital estará exclusivamente en Ribera, que es la filial española del grupo Centene Corporation, dueño último del hospital privado más grande de Galicia. El día a día de Povisa lo llevan los directivos del centro, que no han sido relevados, aunque Ribera desplaza todas las semanas a algunos directivos para tomar decisiones asistenciales. La directora de operaciones del grupo, la médica Elisa Tarazona, está liderando el desembarco del grupo. El director de recursos humanos, Salvador Sanchis, también ha tenido contacto con los sindicatos.
Con el Grupo Nosa Terra, el órgano de administración estaba formado por cinco personas: José Silveira (presidente), su hijo José Bernardo (consejero delegado), su mujer Rosario Martín, el traumatólogo Antonio Pintado y el abogado José Manuel Otero Novas, externo al grupo. Dos de ellos siguen vinculados al hospital. Uno es José Bernardo Silveira, que se ha quedado temporalmente como director general, aunque ya no dentro del consejo de administración. El otro es Antonio Pintado, que continúa como jefe de servicio de traumatología. Con su salida del consejo, deja de haber médicos en el máximo órgano directivo del centro sanitario. Alberto de Rosa ha sido gerente de hospitales, pero es economista, igual que Pablo Gallart.
En su primera comparecencia pública desde la compra del hospital, hace quince días, Alberto de Rosa ya sugirió que quizás se optase por una fórmula «más ágil que la del consejo de administración». Es lo que se ha hecho y va en la línea de las decisiones que Ribera Salud ha ido tomando en otros hospitales, según explica una fuente oficial del grupo sanitario valenciano.
Salarios
En la reunión de la junta de accionistas de esta semana, se acordó que el cargo de administrador no sea retribuido. En el último ejercicio con cuentas auditadas, el 2018, Povisa declaró que pagó a los miembros de su consejo 790.000 euros. No se ahorrará todo ese dinero, ya que las dos personas que siguen vinculadas al hospital tendrán un sueldo, pero sí una parte.