«El penalti lo vio todo el mundo menos quien lo tenía que ver»

Luis Manuel Rodríguez González
luis m. rodríguez REDACCIÓN / LA VOZ

VIGO

M.MORALEJO

El coruxista David Añón habla sobre las decisiones arbitrales contra su equipo

14 ene 2020 . Actualizado a las 05:00 h.

El duelo provincial de la Segunda B en O Vao, entre el Coruxo y el Pontevedra, terminó sin goles pese a las intentonas de un cuadro local que jugó el último cuarto de hora en superioridad numérica por la tarjeta roja a Álex González. Una vez más, la labor arbitral fue cuestionada en el bando anfitrión, donde se toman con filosofía lo que en todo caso consideran una mala racha en cuanto a decisiones de los colegiados. Este fin de semana, David Añón (A Coruña, 1989) fue uno de los vivió situaciones muy polémicas sobre el césped.

«La verdad es que lo de ayer -por el domingo- fue bastante desalentador. Ya le habían hecho un derribo muy evidente a Mateo en la primera parte, pero mi jugada en el tiempo de prolongación la vio todo el mundo, menos quienes la tenían que ver. Centré al área y Campillo lo cortó con una mano muy clara. Es verdad que el árbitro estaba un poco tapado, pero el asistente estaba de frente y no quiso pitarlo», relató el atacante que se reincorporó al fútbol gallego en Coruxo tras una temporada en el Katowice polaco.

David ya había jugado noventa minutos en Pasarón ante su anterior equipo en la península. Esta vez, su impresión es que no hay uniformidad de criterios en acciones como la que se dio en el derbi: «Me parece que no tienen definido lo que es penalti. Algunos árbitros pitan todas las manos y vimos sir ir más lejos una muy clara de Piqué, en el Barça, que tampoco castigaron».

Al margen de las circunstancias, Añón aboga por seguir la línea que marcaron las declaraciones de su entrenador: «Míchel ya comentó que no quiere que sigamos llorando por este tipo de errores y es verdad. Todos están viendo que al Coruxo es fácil pitarle de esta manera. No es tan sencillo en otros campos más grandes y con rivales de más nombre».

El coruñés resalta la entereza de un vestuario que ha sido capaz de concentrarse en su trabajo, en una etapa en la que las polémicas con los arbitrajes se han reiterado en exceso: «Lo del Mirandés en la Copa de Rey fue un escándalo y en la Liga tampoco nos fue bien en varios partidos, pero nos tomamos con resignación los recientes fallos de los árbitros y nos agarramos a que cada día estamos mejor y esperamos que se cumpla ese dicho de que a lo largo de una temporada todo se compensa y vendrán tiempos mejores».

En el plano personal, Añón también tiene motivos para el optimismo y augura una buena temporada para él y para todo el Coruxo: «Conocía a Míchel, aunque no llegamos a coincidir antes, y pude confirmar que es un tío fantástico que te deja muy claro lo que quiere. En el club también estoy muy cómodo, vengo de estructuras más grandes, pero este es muy familiar y cumple con todos sus cometidos dentro de las lógicas limitaciones. Con el equipo, ahí estamos, tenemos un gran grupo y respondimos en la Liga, en la Copa Federación y en la Copa del Rey».