«Estoy durmiendo, no me tomes el pelo. ¿De verdad que nos ha tocado la Lotería?», dijo la hija de la lotera a su hermano cuando se enteró de la noticia
06 ene 2020 . Actualizado a las 19:57 h.La suerte de la Lotería del Niño ha sido esquiva con Galicia en general. Tan solo ha dejado dos pellizcos, uno del primer premio en A Coruña y otro del segundo en el área de Vigo. En este caso el número afortunado ha sido el 21.816, uno de los dos segundos y que ha sido muy repartido por todo el territorio.
Un poco de esa suerte ha ido a parar al bar París, de Nigrán. Dos décimos de ese 21.816 se despacharon desde este local, que durante buena parte de la mañana permaneció cerrado y ajeno al galardón. Desde Loterías y Apuestas del Estado confirmaron la venta de los dos boletos, que sin duda llevarán la alegría a sus compradores.
No es la primera vez que esta administración se ve sorprendida por la fortuna. El 22 de septiembre del año 2000 repartió en la parroquia de Priegue 300 millones de pesetas correspondientes al número 50.215 y el 27 de noviembre de 1999 otros 400 millones con el boleto 50.168. También se selló en marzo del 2000 una quiniela de 54 millones y una primitiva de 87 kilos en 1995.
«No me tomes el pelo»
«Estaba dando un paseo y me llamó mi hijo para decírmelo. Yo aún le contesté que igual había sido en otra administración pero ya confirmó Loterías que éramos nosotros», explica Ángeles Gómez, responsable de la administración. «Son dos décimos de máquina así que no sabemos si fue a la misma persona o a quién», explica aún sin acabar de creérselo junto a su hija Ariadna. «Estoy durmiendo, no me tomes el pelo. ¿De verdad que nos ha tocado la Lotería?», le dije a mi hermano Iago cuando nos avisó y yo aún estaba en la cama». No es el mayor premio que reparten en sus 21 años como administración porque en febrero del 2017 hicieron multimillonario al cliente que selló una bonoloto premiada con 2,5 millones de euros.
«Pero está es la primera vez que damos suerte en esta época», indica Ángeles Gómez asegurando que «aún estamos en blanco». No estaba hoy abierto ni el bar Paris ni la administración, ubicada justo al lado de la Casa Consistorial, pero la suerte ha hecho que la familia se reúna en el establecimiento para celebrarlo.