Miranda detalló que el 2018 fue el quinto año consecutivo de crecimiento del número de retornados en Galicia. Siete mil emigrantes gallegos regresaron a su tierra, principalmente procedentes de Venezuela, por las dificultades que atraviesa este país. En esta legislatura ha habido 18.200 retornados en total.
La oficina permitirá el acompañamiento a los que vuelven para que puedan situarse en los trámites necesarios para vivir aquí. «Muchos llegan perdidos porque en Venezuela todo se compra con sobornos y aquí no es así. Hay unos trámites burocráticos y plazos para seguir. Allí si pides un papel y pagas te lo dan al instante», dice Fernanda Ruiz, venezolana retornada que lidera la Federación de Venezolanos (Fevega) que puso en marcha una oficina en la calle Pino de Vigo donde sigue asesorando a los ciudadanos procedentes de dicho país sudamericano. Uno de los primeros problemas es convalidar los estudios. Ruiz señala que la Xunta «suele ser muy rápida para convalidar el título de bachiller. El problema es con universitarios, que los tiene que homologar el Estado «y a veces tardan año y medio o dos años». «Atopámonos con casos diarios de xente que quere volver a Galicia se atopan moitísimas dificultades, especialmente na tramitación de permisos de residencia para familiares dos galegos do exterior, ou na homologación dos títulos universitarios», expuso Miranda, quien demandó al Gobierno central una mayor implicación en estas materias. El responsable político recordó que la ampliación de la oficina de Vigo es parte también de la Estratexia Retorna 2020, que está desarrollando la Secretaría Xeral de Emigración con un presupuesto global de más de 235 millones, de los que 15 son para ayudas específicas de fomento del retorno. Cada familia recibe de media entre 2.000 y 2.500 euros al volver a Galicia.