Los médicos presionan con una renuncia colectiva a las horas extras

Ángel Paniagua Pérez
Ángel Paniagua VIGO / LA VOZ

VIGO

XOAN CARLOS GIL

Los centros de salud pueden colapsarse si no hay prolongaciones en invierno

11 dic 2019 . Actualizado a las 22:58 h.

Mientras el Sergas asegura que ya está poniendo medidas para mejorar la atención primaria, muchos médicos de cabecera consideran que en los últimos meses apenas se ha avanzado en el principal problema que atenaza a los centros de salud, que es la sobrecarga. Esa sensación de que todo sigue igual movilizó masivamente a los médicos de familia y pediatras de Vigo en la huelga de hace dos semanas y llevó este martes a que la asamblea de facultativos de primaria de la ciudad acordase medidas drásticas. Una de ellas es solicitar a los médicos que no hagan horas extras.

Las horas extras son un elemento clave sobre el cual se apoya el funcionamiento de la atención primaria en Galicia. Se conocen como prolongaciones de jornada y consisten en que los mismos médicos que trabajan por la mañana en su centro de salud acuden por la tarde a su propio ambulatorio o bien a otro para sustituir a un compañero que no está. Esas horas se retribuyen aparte y son voluntarias, y sirven para cubrir sustituciones teniendo en cuenta que apenas hay profesionales en el paro a los que el Sergas pueda llamar para los imprevistos.

Por eso, ahora, como medida de presión, la asamblea acordó «instar a los médicos de atención primaria a no realizar ninguna prolongación tras su agotadora jornada laboral obligatoria», según recoge el acta de la reunión de la noche del martes. 

Ahora que llega el invierno, las prolongaciones son claves para afrontar la oleada de enfermedades respiratorias. La gripe y los catarros saturan los centros de salud cada año nuevo. El personal sanitario no es inmune a ellos y las bajas crecen. Como apenas hay sustitutos en las listas, las agendas de los ambulatorios se convierten en un Tetris diario que se suele resolver gracias a las prolongaciones de jornada. Si no se hacen, la disponibilidad de la atención sanitaria se resentirá y, previsiblemente, crecerá la lista de espera.

El año pasado, poco después de su dimisión, los jefes de servicio sí invitaron a hacer prolongaciones a los médicos para contener la sobredemanda que empezaba a generar la gripe. Pero el contexto ha cambiado. Aquello sucedió una semana después de que el conselleiro de Sanidade, Jesús Vázquez Almuiña, se reuniese con los profesionales para tratar de taponar la crisis de la atención primaria y les prometiese medidas urgentes. Como gesto, los jefes de servicio hicieron un llamamiento público a sus compañeros para que hiciesen prolongaciones. Muchos de aquellos jefes siguen ahora al frente de las reivindicaciones de la primaria, un año después, y el llamamiento es justo el contrario porque la sobrecarga no se ha resuelto. La propuesta pactada en toda Galicia pasa por limitar a 30 el número de pacientes diario.

Las protestas no cesan y la asamblea de médicos ya está preparando una nueva manifestación en Vigo, que pretende catalizar toda la protesta de Galicia. Al mismo tiempo, continúan preparando una demanda contra el Sergas, al que culpan del riesgo psicológico y social que sufren. Ya se han sumado un centenar de profesionales. El organismo ha activado un mecanismo de encuestas telemáticas para evaluar los riesgos laborales, pero la asamblea de médicos acordó no contestarla porque reclaman una evaluación individual de cada puesto de trabajo.

Instan a los tutores docentes a no recibir nuevos residentes el próximo curso 

La espada de Damocles del futuro de la docencia de nuevos médicos sigue amenazando con caer sobre el área sanitaria de Vigo. Un grupo de ex jefes de servicio ya habían acordado hacía semanas que no recibirían residentes el próximo curso. Como hay distintas sensibilidades dentro de la atención primaria viguesa, lanzaron una encuesta a los profesionales. El 85 % apoyó la medida. En la asamblea del martes se acordó por unanimidad advertir a la dirección del Sergas en Vigo que a partir de mayo no recibirán nuevos mir. Sí continuarán con la docencia de los que ya comenzaron. Todos los centros docentes apoyaron esta medida, salvo el de O Porriño, que no estaba representado.

En todo caso, la decisión será individual. Ahora, cada tutor docente tendrá que comunicarle la decisión a la gerencia. La asamblea propone a todos que renuncien, pero eso depende de cada uno. La medida es una respuesta a la sobrecarga. Los médicos entienden que en el último año no se le ha dado respuesta y que ofrecer una docencia de calidad es incompatible con ver a tantos pacientes cada día.

El problema es grande porque hay 24 plazas de médicos de familia acreditadas y otras 7 de pediatría. Sin tutores, no se pueden formar. Y si no se forman, no habrá recambios para cubrir las jubilaciones que se producen cada año. El gerente del área sanitaria de Vigo, Julio García Comesaña, dijo hace un mes: «No nos podemos permitir que primaria renuncie a la docencia».