Disfrutar para buscar la sorpresa

M. V. F. VIGO

VIGO

Oscar Vázquez

El Amfiv inicia la liga con la meta de la salvación, pero su capitán no renuncia a mirar hacia arriba

18 oct 2019 . Actualizado a las 05:00 h.

El vigués Agustín Alejos, de 32 años, comenzó en el Amfiv siendo un niño y ahora ejerce de capitán y de jugador experimentado de una plantilla que este fin de semana inicia una nueva temporada en División de Honor de baloncesto en silla. Él se dispone a empezar la cuarta campaña de su actual etapa en el club de su ciudad, donde ahora le acompaña su mujer y también jugadora del equipo Shelley Cronau. Son dos de los cinco integrantes del año pasado que continúan y a los que se han sumado varios fichajes que prometen, desde el prisma de Alejos.

El equipo de César Iglesias se presenta este año con un bloque más joven que el curso pasado, advierte Alejos. «Eso conlleva falta de experiencia y más altibajos», comenta, pero también tiene cosas buenas. «Siempre me ha gustado mucho enseñar a la gente joven y asumir responsabilidades. Y qué mejor que hacerlo rodeado de jugadores como los dos ingleses de 21 años que han venido -en referencia a Lewis Edwards y Sam Mack- o Franco y Salvador, de 24», dice.

A la hora de hablar de objetivos, la palabra permanencia es la primera que sale de su boca. «A partir de ahí intentaremos dar alguna sorpresa con los de arriba, que siempre se nos ha dado bien una cada año», señala. Pero la meta más importante que se han marcado es otra: «Internamente nos proponemos salir a disfrutar cada partido y eso vamos a intentar».

Las sensaciones en pretemporada han sido buenas, sobre todo en el aspecto defensivo. «En ataque aún nos falta conjuntarnos un poco más, pero hemos tenido ausencias y cuando estemos todos el nivel será mayor, los entrenamientos serán más exigentes y eso hará que crezcamos todos», avanza.

Este curso cuentan con una plantilla de ocho integrantes, cinco que siguen y tres caras nuevas, y además se les suman habitualmente dos jugadores de las escuelas en los entrenamientos. «Tenemos dos rotaciones, así que ya somos más que hace dos años, cuando tuvimos que afrontar algunos partidos con cinco y seis jugadores. Tenemos recambios, variedad y alternativas. Creo que el club ha hecho un gran trabajo», recalca. En otras ocasiones, él mismo echaba una mano en la confección de la plantilla, pero admite que este año prefirió quedarse al margen.

Ofertas de fuera

Tanto Alejos como Cronau tuvieron claro seguir un año más en Vigo. «Todos los años llega alguna oferta económicamente mejor, tanto de España como de fuera, pero nada que digas: ‘Me pagan tanto que me tengo que ir’», comenta. Porque además del dinero, la pareja valora el proyecto y la familia baloncestística que han encontrado en Vigo. «Tenemos en cuenta el proyecto social del club, el cuerpo técnico, la familia que se forma con todo el mundo, el cariño de la afición que nos viene a ver...». Y la integración de Shelley, australiana, que a día de hoy se siente tan en casa como su marido.

Con todo, no descartan volver a salir. «Somos muy aventureros. A mí me gustaría retirarme en el Amfiv y luego seguir ligado al baloncesto, que estoy cursando el ciclo medio de entrenador, pero igual volvemos a salir», comenta dejando abierta esa puerta.

Mientras, disfrutarán otro año del Amfiv y de la que para Alejos es una de las mejores competiciones de este deporte. «Es la liga más potente de Europa y diría que del mundo. De los doce campeones de Europa con Gran Bretaña, once juegan aquí y de la selección española, todos menos uno». Entre ellos, el propio Alejos, que aunque se quedó sin vacaciones por esos compromisos, afronta la nueva temporada con las pilas cargadas.