La mitad de los vigueses podrán cambiar de hospital de referencia en mayo

Ángel Paniagua Pérez
ángel Paniagua VIGO / LA VOZ

VIGO

Oscar Vázquez

El Sergas abre un nuevo plazo para pasarse del Chuvi a Povisa o al revés, aunque no todo el mundo tiene derecho

28 abr 2019 . Actualizado a las 05:00 h.

En el mes de mayo se abrirá el plazo para que una parte de la ciudadanía de Vigo y su área de influencia elija hospital de referencia: o bien el Complejo Hospitalario Universitario de Vigo (Chuvi, que aglutina al Cunqueiro, al Meixoeiro y al Nicolás Peña) o bien Povisa. La posibilidad de escoger un centro sanitario dentro de la asistencia que sufraga el Sergas se estrenó en el 2014. Desde entonces, el período venía coincidiendo con el mes de noviembre. Pero Povisa y el Sergas acordaron una serie de cambios en el contrato que regula sus relaciones -el llamado concierto singular- después de que el hospital, el mayor de Galicia de titularidad privada, entrase en preconcurso de acreedores a finales de septiembre. Uno de esos cambios es que el período para elegir hospital sea mayo.

El Sergas todavía tiene que publicar en el Diario Oficial de Galicia una resolución que detalle el procedimiento, pero fuentes del organismo sanitario confirman que el derecho para elegir hospital seguirá los mismos parámetros que la última vez. Es decir, podrán elegir hospital las personas adultas que tienen el médico de cabecera en los centros de salud de Beiramar, Coia, Colmeiro, Coruxo, López Mora, Navia, Nicolás Peña y Rosalía de Castro, además de los de Cangas, Moaña, Baiona, Gondomar y Nigrán.

Son en torno a 210.000 personas, del total de 490.000 que hay en el área de Vigo -sin contar a los menores de quince años, ya que toda la pediatría se concentra en el Cunqueiro-. Representa el 43 % de la ciudadanía. El resto no pueden elegir hospital. Este derecho quedó consagrado cuando el Sergas y Povisa cerraron su concierto del año 2014, el mismo al que después el hospital privado culpó de las pérdidas que le llevaron a entrar en situación de preconcurso de acreedores.

En cualquier caso, no se prevén grandes movimientos. El último período en que estuvo abierta la elección de hospital fue del 17 de noviembre al 16 de diciembre. Lo esperable habría sido que ese plazo se hubiese abierto el 1 de noviembre, pero el Sergas lo retrasó mientras negociaba con Povisa su salida del preconcurso. Al final, el acuerdo con el hospital llegó el 19 de diciembre, al límite del tiempo legal.

En total, 1.511 personas se cambiaron de hospital entre noviembre y diciembre. De ellas, 1.117 abandonaron Povisa, un 45 % más que el año anterior. Fue el primer año desde que se abrió la posibilidad de elegir de hospital en el que Povisa perdió más pacientes de los que ganó, y ocurrió mientras el hospital privado hacía públicas sus dificultades financieras y negociaba una salida con el Sergas para que absorbiese parte de sus gastos, como finalmente hizo

Como eso sucedió hace solo cinco meses y medio, no se esperan grandes movimientos. En aquel momento, el hospital del Grupo Nosa Terra se quedó con 135.574 personas a su cargo.

El procedimiento

En el mes de noviembre, se abrió la posibilidad de cambiarse de hospital desde la página web del Sergas, siempre que el ordenador tuviese certificado digital, como para el médico de cabecera. Casi nadie siguió este método. Sigue triunfando el papel, algo que se puede tramitar tanto en Povisa como en los hospitales del Sergas.

Povisa anuncia que renueva su certificado más prestigioso

El Hospital Povisa anunció ayer que ha renovado uno de los certificados que cuida con más mimo, la acreditación de la Joint Commission International. Se trata de la tercera vez que el centro sanitario vigués logra el certificado, uno de los más prestigiosos del mundo en cuanto a calidad. Solo hay trece hospitales que tienen este sello

En el mes de febrero, un equipo dirigido por el checo Frantisek Vlcek recorrió el hospital. Midieron 1.300 elementos, según detalla el centro sanitario en un comunicado. Como novedad, los auditores se reunieron con doce pacientes atendidos o intervenidos en el último año en el hospital, a los que preguntaron sobre el trato y sobre muchos aspectos relacionados con su estancia. También entrevistaron durante cinco días a otros pacientes, revisando su historia y la atención prestada, y a un grupo de personas que atravesasen situaciones de gravedad extrema.

Además del trato y los procesos que se siguen con los pacientes, la Joint Commission inspeccionó el uso de antibióticos y el control de las infecciones, que son aspectos clave en la política de calidad de los hospitales, que en Povisa dirige María Antonia Muñoz. Además, revisaron los procesos que garantizan una cirugía segura, desde la preparación hasta el seguimiento posterior.

Povisa logró la acreditación de la Joint Commission en el 2013 y ha venido renovándolo. Es el único hospital gallego que la tiene. Junto a este, ha conseguido otros certificados de calidad.