Beatriz Rodiño: «Queremos ampliar nuestra labor al diseño de prótesis para caballos y animales exóticos»

Beta Implants, startup dedicada al diseño y producción a medida de implantes para animales, se ha convertido en la ganadora del Premio ViaGalicia 2019. La sexta edición del programa impulsado por la aceleradora de empresas de Zona Franca de Vigo y Xunta de Galicia entregó ayer el premio a la ingeniera Beatriz Rodiño (Pontevedra, 1984), directora general de la empresa con sede en Salvaterra que creó junto a su socio, también ingeniero, Antón Rodríguez (Ourense, 1984). La distinción está dotada con 150.000 euros de financiación y el acto puso el colofón al Investors Day, jornada en la que alrededor de un centenar de inversores han podido conocer las oportunidades de negocio e inversión de las startups participantes en esta última edición..

-A la hora de otorgarles el premio, la organización destacó su carácter innovador y el hecho de que con su trabajo contribuyen a mejorar la calidad de vida. ¿A qué se dedican exactamente?

-Somos una empresa dedicada al diseño, fabricación y suministro de implantes desarrollados específicamente para traumatología, ortopedia y neurocirugía veterinaria. Para nosotros este premio supone poder llegar más lejos todavía con lo que estamos haciendo. Vamos a poder contratar a más personas, comprar nueva maquinaría, desarrollar I+D para lanzar otros productos y llegar a más mercados, no solo geográficamente a nivel internacional, sino ampliar nuestro trabajo al diseño de prótesis para caballos y animales exóticos.

-No es el tipo de empresa habitual en Galicia. Problemas de competencia no tendrían, ¿no?

-Ninguno. Cuando decidimos empezar no había nada en Galicia, ni en España ni fuera casi tampoco. Antón y yo somos dos ingenieros a los que siempre nos ha gustado la ingeniería relacionada con el campo de la salud. Yo hice mi trabajo de fin de carrera colaborando con un proyecto de I+D sobre diseño de implantes, vi que había oportunidad de mercado y nos asociamos en esta aventura. Él es especialista en fabricación y yo en diseño.

-¿Cómo fueron sus inicios?

-Cuando empezamos fue en el 2013. Nos instalamos en un garaje en Ourense y ahí comenzó todo. Compramos maquinaria antigua, del año 89. Estuvimos año y medio poniéndola a punto, trabajando en la oscuridad. Hasta el 2015 no nos dimos a conocer. pasamos del garaje a la nave en Salvaterra y ahora somos 15 personas. Para sacar adelante algo así se necesita cerebro y músculo.

-Ya tienen un nombre dentro del sector. ¿Qué supone el premio ahora?

-Es muy importante porque nos permite seguir creciendo, algo a lo que ya nos ayudaron antes. Ya el hecho de estar seis meses en el centro de negocios de Porto do Molle nos ayudó mucho en apartados como la formación empresarial, asesoramiento en cuanto a estrategias de mercado y organización.

-¿Hasta dónde han llegado sus prótesis?

-Bastante lejos. Hemos vendido más de 4.000 prótesis. Tenemos más de 200 clientes en España, Portugal, Reino Unido, Italia y estamos entrando en Francia. En España está cambiando mucho el sector veterinario, especializándose. Hay centros muy punteros de traumatología veterinaria. En Galicia también, como el hospital que acaban de abrir en a Coruña, o la clínica Fauna de Pontevedra.

-La mayor parte de las prótesis que diseñan son para perros y gatos, ¿no?

-Sí, pero hemos hecho de todo: conejos, pájaros, una oca... No decimos que no a nada. Hacemos implantes por catálogo o a medida, lo cual nos lleva no solo a trabajar en casos raros, sino con animales menos comunes.

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