La Guardia Civil indentifica a dos perros como sospechosos del ataque a unas cabras en Baiona

La Voz BAIONA / LA VOZ

VIGO

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Se trata de dos mastines que se encontraron en un avanzado estado de desnutrición

22 feb 2019 . Actualizado a las 05:00 h.

La Guardia Civil considera que dos perros que fueron localizados hace unos días en Baiona fueron los que atacaron a la cabaña de cabras de un vecino. Se trata de dos mastines, que se encontraron en un avanzado estado de desnutrición según el veterinario y que ahora están a cargo de la protectora de animales Baisenpulgas, donde se recuperan desde hace una semana. El vecino que denunció que en diciembre le mataron doce cabras y que su cabaña sufrió hace unos días otro ataque, identificó a estos dos perros en el lugar de los hechos en los días previos, según informó la Guardia Civil.

Ninguno de los animales tiene microchip por lo que aún no se han podido identificar a sus propietarios. Según el informe del veterinario, uno de ellos «tiene una condición corporal muy baja, compatible con inanición y otras condiciones de tipo crónico. Sin embargo tiene apetito». «Presenta carácter equilibrado y tranquilo, interactúa con el personal de la clínica, así que no es necesario usar bozal para ponerle el microchip». La exploración clínica del segundo es «correcta». «Tiene buena condición corporal, buen carácter, se deja explorar y colocar el microchip sin ninguna reacción de agresividad».

Cualquier persona que pueda aportar información sobre la procedencia de los animales o sobre sus posibles propietarios puede ponerse en contacto con la protectora Baisenpulgas o con la Guardia Civil. No se descarta que haya otros perros tras los dos ataques que asegura sufrió su cabaña este vecino de Baíña. El último fue hace tan solo diez días. Según su relato, en las dos ocasiones, la agresión se produjo tras escuchar el ruido del motor de un coche, como si alguien abandonara en el lugar los perros. Denunció hace días la desaparición de 32 cabras tras un ataque que dejó a varios animales heridos. Sus pérdidas, indicó, superan los 20.000 euros ya que todas las cabras estaban preñadas y de hecho, duda que las que fueron atacadas puedan llevar a término el parto.