La huelga de funcionarios ya es un motivo para reducir penas de cárcel

E. V. PITA VIGO / LA VOZ

VIGO

M.MORALEJO

La Audiencia admite el parón de tres meses como una atenuante por la demora judicial. Sorpresa entre los abogados penalistas porque nunca han visto nada igual

15 feb 2019 . Actualizado a las 05:00 h.

La huelga de funcionarios judiciales que duró tres meses en la primavera del 2018 y que obligó a aplazar miles de juicios ha tenido un efecto secundario inesperado. Algunos jueces ya están reduciendo las condenas de cárcel a los acusados porque consideran que el parón es un retraso injustificado y le compensan con una atenuante de dilaciones indebidas. El magistrado estima los aplazamientos para celebrar el juicio son achacables a la Administración de la Justicia y que el acusado tuvo una pena de banquillo excesiva mientras esperaba a que se hiciese Justicia. Una reciente decisión en este sentido causó sorpresa entre los abogados penalistas.

El caso más reciente fue reconocido en la sentencia que condena a un funcionario jefe del Concello de Vigo por enchufar a la cuñada de Carmela Silva, teniente de alcalde de Vigo. El tribunal de la Quinta Sección de la Audiencia de Pontevedra, con sede en Vigo, indica en el sentencia que hubo una situación de «cierta paralización» ante el tribunal, que recibió el expediente el 20 de noviembre del 2017 y celebró el juicio en enero del 2019.

«A la demora ha contribuido de forma poderosa, una huelga de funcionarios de la Administración de Justicia, que iniciada en el mes de febrero se prolongó hasta abril de 2018, como resulta notorio. Consta que por el tribunal se convocó a las partes para juicio oral, para los días 15 y 16 de mayo de 2018, por lo que se ha producido una celeridad en el señalamiento, tras el fin de la convocatoria de la huelga. Consta en la causa que dicho señalamiento se tuvo que suspender, por razones de enfermedad de una testigo», indica la sentencia.

La Audiencia añade que «estas circunstancias que han generado una demora en la celebración del juicio, aún comprensibles y justificables, no pueden perjudicar a la persona o personas contra las que se dirige la acusación». Por ello, para compensar el posible menoscabo que la tardanza pudiese tener para el derecho de ambos acusados a ser enjuiciados en un plazo razonable o sin dilaciones indebidas, le benefician con una atenuante. En la práctica, equivale a una reducción de tiempo de condena.

La resolución ha sorprendido a letrados judiciales, que nunca habían oído de la huelga como dilación, pero también a veteranos abogados penalistas como Carlos Borrás, que indica que «yo es la primera vez que lo veo».

Por su parte, el letrado Darío Costas recuerda que tuvo alguna suspensión de juicios durante la huelga «pero ya había dilaciones antes. La realidad es que en la mayoría de los asuntos había dilaciones antes de la huelga. Mencionar la huelga es solo sumar motivos, pero lo normal es que ya antes hubiese dilaciones».

La abogada penalista Esther Lora señala que admitir la huelga como dilación indebida es novedoso porque hasta ahora a ella no le ha coincidido ningún caso así y duda que haya muchas sentencias en ese sentido. «Al final, fueron tres meses de huelga y con ese parón es complicado que nos aprecien las dilaciones», señala. A otra jurisconsulta, Ana García Costas, tampoco le consta que por ese motivo se haya tenido en cuenta dilaciones indebidas como atenuante.

El fallo del sistema de videconferencias puso en jaque la celebración de varios juicios

Un fallo en las videoconferencias puso en riesgo la celebración de varios juicios en Vigo ayer por la mañana. La avería tenía un alcance en toda Galicia y duró horas.

Un fallo en el sistema informático ha impedido celebrar varios

juicios en Vigo porque las videoconferencias no funcionaban. Al parecer, el problema afectó a más juzgados de Galicia.

En el tribunal de lo Penal número 1 de Vigo se cayó la videoconferencia pero no fue necesaria realizarla porque las partes cerraron un acuerdo por conformidad.

En el Penal número 3 se resolvió de la misma forma, pues hubo un pacto para aceptar la condena,

sin necesidad de celebrar la vista.

Según la Axencia de Modernización de la Xunta (Amtega), que es la encargada de velar por el funcionamiento de las comunicaciones informáticas en los edificios judiciales, se trata de incidencia técnica que afecta a cuatro salas de Vigo.

Amtega añade que algunas vistas se pudieron realizar a lo largo de la mañana en otras dependencias para celebrar audiencias y en las que no tenían juicios programados. Aprovecharon que estaba disponible el sistema de videoconferencia.

«Se está trabajando para solucionar la incidencia cuanto antes», indicaban ayer por la tarde fuentes de este servicio informático.

Las videoconferencias suponen un gran avance porque los testigos pueden declarar a distancia desde otras ciudades e incluso desde la cárcel pero, a veces, un fallo técnico en las comunicaciones puede retrasar durante horas un juicio.