Vecinos del barrio de A Salgueira se juegan el tipo para tomar un café o ir de compras

Luis Carlos Llera Llorente
luis carlos llera VIGO / LA VOZ

VIGO

Luis Carlos Llera

Los residentes en las vivienda sociales se han quedado sin autobús por culpa de un socavón en el subsuelo

19 sep 2018 . Actualizado a las 17:52 h.

Las viviendas sindicales de A Salgueira están a casi un kilómetro del centro comercial Gran Vía. Es una distancia asequible caminando para cualquier persona joven, pero para los mayores es un problema ir cargados con la compra sin poder usar el autobús. Desde el pasado día 11, los vecinos del barrio de A Salgueira no pueden utilizar la línea 18A en dirección al Carrefour.

La calle Coutadas está cortada desde ese día por el reventón de una tubería de abastecimiento de agua potable. Es el segundo corte consecutivo en este mes de septiembre. El primero se produjo el 6 por una fuga de agua que fue reparada. Precisamente, esa misma jornada en que se reabría al tráfico Coutadas se produjo el afloramiento de un gran río subterráneo. La rotura de una tubería de abastecimiento de agua potable produjo una acumulación de en el subsuelo que afloró hacia la superficie, cuarteando el pavimento de alquitrán abruptamente y convirtiendo la calle en un torrente de agua y fango que ha dejado un rastro de barro a los pies de varias naves industriales.

Cuando se produjo el anegamiento de la calle un chófer de Vitrasa optó por dar la media vuelta y el Concello cortó el vial. Coutadas ha estado en obras desde el día 11. Los operarios de Aqualia cortaron la calle que ha sido sometida a una reparación en profundidad dado el mal estado que presentaban las tuberías de abastecimiento de agua potable. El agujero horadado por las filtraciones tenía grandes dimensiones. La bolsa de agua ocupaba unos cinco metros de largo por tres de ancho. Para sanear y asentar el firme de la calle fue preciso inyectar hormigón a un tramo más amplio, de veinte metros de longitud. La zona de la avería coincide con el lugar donde se estrecha el vial y en el que no hay aceras. La falta de beirarrúas ha estado dificultando el tránsito de os vecinos, algunos de ellos con problemas importantes de movilidad, como es el caso de Agustín López, que ayer aguardaba apoyado en sus muletas a que fraguase el hormigón porque no tenía sitio para caminar entre el camión y el muro que limita la carretera en el punto donde se angosta. «Yo suelo ir a tomar café al bar de ahí al lado y hoy tengo que tener paciencia», decía con estoicismo Agustín, aguardando poder desplazarse hasta la cafetería O Castaño.

La avería produjo un anegamiento de la calle. Antes de que se cortase el agua y aumentase el perjuicio se formó un gran charco de agua y barro que llegó a varias naves industriales. Una de las perjudicadas es una empresa de piezas de motores de barco, cuyo propietario, José Martínez Izquierdo, relata: «Tuvimos que limpiar todo nosotros porque como ahora el Ayuntamiento no baldea las calles. Claro que aquí no ha baldeado nunca».

En la zona hay seis empresas. Lino Rodríguez, empleado de una compañía de abrasivos, del polígono de A Salgueira, asegura que a raíz del corte de la calle se han producido problemas logísticos al no poder circular por Coutadas porque está cortada los camiones tiene que buscar otra salida del barrio de A Salgueira y esta zona resulta un laberinto de calles estrechas donde el GPS puede dar muchos disgustos a camioneros poco experimentados en la zona.

En estos momentos las tuberías han sido renovadas y la calle está tapada, pero falta alquitranar el pavimento. Está previsto hacerlo antes del viernes. Mientras, los mayores se juegan el tipo para ir al centro comercial.