Iberia incita a sus clientes que se dirigen a Vigo a volar a Santiago, Oporto y A Coruña

Carlos Punzón, Manu Otero VIGO

VIGO

Oscar Vázquez

El alcalde de Vigo, Abel Caballero, pide a la aerolínea que rectifique

08 jun 2018 . Actualizado a las 12:00 h.

Iberia, una de las aerolíneas que mayor número de vuelos está cancelando en Vigo en los últimos días a raíz de la desconexión del sistema antiniebla, conminó ayer a sus clientes a pensar dos veces si están convencidos de volar al aeropuerto de Peinador o evitarlo en sus actuales circunstancias, optando mejor por otras terminales.

En una misiva remitida no solo a sus clientes, sino también a los de Iberia Express y a los de Air Nostrum, señala que a quienes tengan planeado volar entre los días 6 y 10 de junio a/o desde Vigo tienen la opción de hacerlo desde otros tres aeropuertos. «Tiene la posibilidad de reservar en cualquier vuelo con origen o destino en Santiago, A Coruña y Oporto», explica el anuncio remitido también a las agencias de viajes dando opción al cambio de destino. En ningún momento la compañía explica que el aeropuerto está siendo objeto de la sustitución del ILS, atribuyendo solo las dificultades a «las condiciones meteorológicas adversas en Vigo». Iberia indica que los inconvenientes son ajenos a la aerolínea, tras lo que añade el agradecimiento por la paciencia y comprensión de los afectados.

Los gestores de Peinador hacen hincapié por su parte en que, especialmente en el caso de Iberia, se han producido cancelaciones sin que estuviesen activados los procedimientos por baja visibilidad.

En todo caso, la inestabilidad sigue imperando en el aeropuerto de Peinador. La jornada de ayer comenzó con sobresalto en forma de cancelación de los primeros vuelos de la mañana que, junto con los nubarrones que cubrían el cielo vigués, presagiaban una nueva jornada de desvíos y cancelaciones. «Cuando vi pasar el avión por la pista no me lo podía creer», explicaba una trabajadora de Aena a unos pasajeros preocupados por la situación atmosférica. Era el primer aterrizaje de la mañana en una pista tomada por la niebla. «En la cabecera, en la zona de Redondela, está despejado, pero no sabemos cuánto durará», cruzaba los dedos la responsable de la institución que controla los aeropuertos.

Pasaron las horas, el claro se mantenía y el optimismo, después de varias jornadas negras, se disparaba a la misma velocidad con la que los aviones despegaban y aterrizaban. Todo cambió en cuestión de minutos. «Desviado». La palabra más odiada de la terminal apareció en el panel de llegadas en referencia a un vuelo procedente de Madrid y el nerviosismo volvió a apoderarse de los que esperaban la llegada de sus familiares o la hora para volar.

«¿Dónde aterriza el avión?», «¿Cómo los van a traer a Vigo?», «¿Desde dónde va a despegar mi vuelo?»... Decenas de preguntas que algunos operarios atendían con menos mano izquierda que otros. La solución fue el traslado a Santiago de los afectados para despegar desde allí.

«Es la primera vez que me pasa, tengo una reunión en Madrid y puede que no llegue», sostenía preocupada Cristina Diéguez. «Últimamente parece que esto es lo normal», añadía con notable enfado Celia Esperón. La situación fue todavía peor por la tarde con el desvío de la mayor parte de los vuelos.

Hartos de los problemas derivados de la sustitución del sistema antiniebla los afectados presentaron reclamaciones. Aena comprende el malestar, admite las quejas y alega que la obra «era necesaria». Pero el alcalde de Vigo, Abel Caballero, no traga y lanza al aire una acusación de voluntariedad. «No es posible hacerlo tan mal, salvo que alguien no tenga interés en que Peinador funcione bien», sospecha.

Doce vuelos desviados y tres cancelados

El caos volvió reinar ayer en el aeropuerto de Vigo. La falta de visibilidad y la ausencia por labores de sustitución del sistema antiniebla obligaron a desviar una docena de vuelos a aeropuertos cercanos y a cancelar tres desplazamientos. Fueron desviados a la terminal de Santiago tres aviones procedentes de Madrid que debían aterrizar a las 11.50, 12.50 y 15.50 horas. También aterrizaron en Lavacolla los procedentes de Edimburgo a las 13.55 horas y de Barcelona a las 17.55 horas. El vuelo de la compañía TAP procedente de Lisboa aterrizó en Oporto a las 15.20 horas. Las salidas asociadas a estas llegadas se realizaron desde los aeropuertos a los que llegaron. También se cancelaron tres vuelos Madrid-Vigo.