manu otero
El lugar de A Torre quedó reducido a escombros como consecuencia de la explosión de un almacén clandestino de material pirotécnico. Un escenario de guerra que resultará familiar a muchos vecinos de Tui que ya han sido testigos en otras dos ocasiones de sucesos similares en las instalaciones de la pirotécnica La Gallega. Ya ocurrió en marzo del 1980, con la muerte de una trabajadora, y en el mismo mes del 2005, con múltiples daños materiales.
Las crónicas de La Voz de aquel primer incidente recogían que «dos violentas explosiones borraron del mapa el taller de la pirotécnica de Baldráns y causaron heridas gravísimas a una de las cuatro operarias». Al día siguiente, la trabajadora Remedios Romero fallecía en el hospital como consecuencia de las heridas que le produjo la explosión. Para el terreno de lo anecdótico quedan las 300.000 pesetas, en billetes de mil, que portaba la víctima y que acabaron esparcidas por el suelo del taller.