cine fueron algunas de las disciplinas que practicó. Fundador del movimiento cineclubista portugués tras su formación con los maestros de la nouvelle vague, su película Dom Roberto ya fuera premiada en Cannes en 1963 además de entrar en contacto con el movimiento Fluxus.
Para Sousa, Almada era una personalidad artística referente. Entre 1969 y 1972 realiza Almada, um Nome de Guerra, film performista en el que combina diferentes momentos grabados con el artista futurista con proyecciones swiper-slides acompañadas de una intensidad sonora creada por el músico Jorge Peixinho. Almada había fallecido en 1970 y era necesario dar fin a su proyecto y la imprenta de Quid en la calle Portela, en el Calvario, un lugar decisivo para ello. La colaboración de Gentil-Homem, Sousa, Isabel Alves, Calvet, etc. generó la parte gráfica que se incorporaría al filme en el verano de 1971 en la ciudad olívica: leyendas con frases de Almada, palabras, poemas: «Uma investigaçao gráfica centrada na palavra, O Gentil-Homem inventa um grafismo fundamental. Tem uma importância extrema a palabra (escrita, falada, cantada), tudo a partir de elementos de Almada» (Diário de Noticias, Lisboa 15, agosto 1971).