El juez obliga al Concello a perdonar el IBI a la concesionaria del Cunqueiro

Ángel Paniagua Pérez
Ángel Paniagua VIGO / LA VOZ

VIGO

M.MORALEJO

La ordenanza de Vigo exime del impuesto a los centros sanitarios del Sergas, pero el Ayuntamiento argumentaba que el hospital de Beade es privado. El recibo es de un millón de euros al año.

02 feb 2018 . Actualizado a las 12:03 h.

La ordenanza del impuesto sobre bienes inmuebles de Vigo dice que los centros sanitarios del Sergas construidos a partir del 2007 no pagan IBI. Sin embargo, aprovechando el debate sobre la titularidad pública o privada del nuevo hospital de Beade, el Concello de Vigo lleva dos años pasando el recibo a Sociedade Concesionaria Novo Hospital de Vigo S.A., la unión de empresas que construyó el Álvaro Cunqueiro y que explotará durante veinte años sus servicios no clínicos. Cada recibo es de casi un millón de euros. Esa sociedad recurrió ante los tribunales y estos acaban de darle la razón: el Ayuntamiento de Vigo tiene que eximir del IBI a la concesionaria del Cunqueiro.

Así lo dice una sentencia dictada la semana pasada por el Juzgado de lo Contencioso-Administrativo número 2 de Vigo. El Concello basaba su argumentación en que la concesionaria es titular de una concesión administrativa y, por tanto, era a ella a quien correspondía pagar el impuesto. El juez Antonio Martínez Quintanar concluye que «el Sergas es titular del derecho de propiedad sobre el inmueble», ya que el Registro de la Propiedad «refleja el 100 % del pleno dominio del inmueble».

Además, el Ayuntamiento afirmaba que no se podía eximir del pago a la concesionaria porque no lo había solicitado. El juez le contradice, al afirmar que «tiene que aplicarse de oficio». Así se hace siempre con los edificios sanitarios, aporta el magistrado, y además la propia ordenanza del IBI establece algunos edificios que están exentos del impuesto si previamente se solicita. Los sanitarios no están entre los que requieren solicitud previa, de ahí que el juez concluya que no se deba exigir.

El fallo es significativo porque estaban en juego los 965.864,31 euros del recibo del año 2016 (la apertura del hospital concluyó en septiembre del 2015). Pero no solo. El Concello volvió a pasar el impuesto a la concesionaria en el 2017, y esta también lo ha recurrido.Por tanto, no era solo un recibo lo que estaba en juego, sino todos los que habrá en los veinte años que dure la concesión, que se acercarán a los veinte millones. La trascendencia está en que el magistrado de lo contencioso-administrativo advierte que, además de perdonar el recibo del 2016, se debe reconocer «el derecho de la demandante [la concesionaria] a la aplicación de la exención prevista». Por tanto, con este pleito la concesionaria se ha ahorrado unos veinte millones.