Un profesor de la Universidad advierte sobre declive de los polinizadores, más allá de las abejas
VIGO
El docente Luis Navarro es el creador de una plataforma dedicada a fidundir «de forma amena» información sobre biodiversidad
27 ene 2018 . Actualizado a las 11:49 h.Agroquímicos, especies invasoras y fragmentación de ecosistemas son las causas principales del declive de todos los polinizadores, no solo las abejas, ha señalado Luis Navarro, profesor titular del Departamento de Biología Vegetal y Ciencias del Suelo de la Universidad de Vigo.
Este especialista, creador del proyecto Divulgare para difundir de forma amena información sobre biodiversidad, ha indicado que «las campañas habituales de concienciación simplifican demasiado» porque suelen centrarse exclusivamente en la abeja melífera.
Esto es «un error, porque el problema afecta a las entre 20.000 y 30.000 especies distintas de abejas que existen» y, más allá, a la mayor parte de los «más de 300.000 polinizadores diferentes que conocemos, incluyendo aves, reptiles, marsupiales..., y, naturalmente, insectos, como moscas, mariposas o escarabajos».
De ahí la importancia de conservar la biodiversidad, pues «no podemos mantener ecosistemas solo con uno o dos tipos de abejas sociales domesticadas» que, además y paradójicamente, «no son muy eficientes en la polinización de muchas especies de plantas nativas».
Como científicos, «toca decir verdades incómodas, pero hay bastantes estudios que muestran que la abeja melífera desplaza a muchos polinizadores nativos» actuando así como una especie invasora que relega a las que sí están preparadas de manera eficaz para fecundar a las plantas de un ecosistema concreto.
Los insectos silvestres, por ejemplo, producen «el doble de frutos que las abejas domesticadas y de forma más consistente, porque su aportación es más constante», ha subrayado.
En todo caso, los polinizadores se enfrentan a amenazas serias, como los compuestos químicos de pesticidas, fertilizantes y otros productos de uso extendido en la agricultura extensiva, «que tienen un efecto nocivo sobre muchas de sus poblaciones», o la fragmentación de ecosistemas, que obstaculiza e incluso confina a las especies en territorios limitados.
Navarro llama la atención sobre la contradicción de que «demos más importancia a la desaparición de osos polares en un hábitat concreto que al deterioro de los ecosistemas básicos, cuando éstos son los encargados de mantener toda la biodiversidad».
Reconoce que los polinizadores no son muy populares pero el hecho es que casi nueve de cada diez plantas existentes en la Tierra son angiospermas -producen flores y frutos con semillas- y la inmensa mayoría necesitan ser polinizadas para sobrevivir.
No es un problema exclusivamente medioambiental pues, según los datos manejados por este experto, un 75 % de las cosechas del planeta depende de los polinizadores y su valor económico mundial oscila entre los 45.000 y los 150.000 millones de euros anuales.
Para paliar el déficit de información científica de muchos ciudadanos, Navarro puso en marcha, junto a varios científicos del Laboratorio de Ecología y Evolución de la Universidad de Vigo, el grupo Divulgare (www.divulgare.net), que surgió de «nuestra frustración al ver que el trabajo que hacíamos con dinero público no tenía repercusión, no llegaba a la sociedad que lo financia».
Tras contactar con artistas gráficos y comunicadores profesionales, organizaron un grupo multidisciplinar que, además de textos, distribuye humor gráfico y vídeos sencillos y explicativos con el reto de «trascender la barrera del ámbito universitario e investigador».
Navarro cree que, casi diez años después, «estamos consiguiendo nuestro objetivo y lo digo sin pudor porque el mérito es de todo el grupo», como demuestra la distribución de su material divulgativo en más de 150 países y el más de millón y medio de visualizaciones de sus vídeos solo en la plataforma de Vimeo, aunque están presentes en otros ámbitos como Youtube.
Además, «hemos recibido menciones en veintidós festivales internacionales de cine convencional con nuestras historias de insectos y plantas», algo «muy complicado de conseguir».
Navarro cree que es «importante» acercar la información científica a una mayoría social que actualmente «prefiere los campos de fútbol, en los que no digo que no se pueda aprender cosas, pero seguramente en Ciencia tenemos historias más bonitas que contar». EFE