Sugieren que poder beber cerveza a partir de los 16 años frenaría el botellón

L. C. Llera / M. C. VIGO, REDACCIÓN

VIGO

PACO RODRÍGUEZ

Los médicos desautorizan la opinión del responsable de la Federación de Discotecas

27 dic 2017 . Actualizado a las 22:25 h.

La sociedad parece no acabar de entender las peligrosas consecuencias del consumo de alcohol, sobre todo entre los menores, cuyo desarrollo neurológico no se ha completado, y de las que advierten numerosos estudios médicos. Prueba de ello es que ayer la Federación de Discotecas y Salas de Fiestas de Galicia sugirió que debería permitirse el consumo de alcohol de baja graduación a partir de los 16 años, ya que, en su opinión, «los prohibicionismos conducen a un consumo mayor», según señaló el presidente del colectivo, el abogado Samuel Pousada.

Médicos consultados no están de acuerdo y advierten de que no depende de la graduación, porque el alcohol afecta al desarrollo neurológico del menor. «Los efectos son iguales, el problema no es que se prohíba, es que hay acceso a él. Los menores no pueden beber alcohol», apunta tajante el coordinador de Urgencias del Chuac, en A Coruña, José Manuel Fandiño. A su vez, el responsable de la Sociedad Gallega de Urgencias, Tato Vázquez, añade que «el nivel de alcohol en sangre es el mismo cuando se beben dos vasos de whisky que, por ejemplo, dos botellas de vino».

Pero la entidad, que aglutina a medio centenar de establecimientos hosteleros, que viven sus horas bajas por la caída del ocio nocturno, dice que hay que cambiar la ley del 2010 porque «en lugar de reducir el consumo ha fomentado el botellón». En su opinión, la legislación pretendía reducir la ingesta de alcohol por parte de los menores, pero este problema no se ha atajado sino que se ha dado pie al consumo de forma masiva en las calles, que «se ha institucionalizado». «Como no pueden entrar en las discotecas se quedan en la calle y hacen lo que les da la gana», se queja el presidente del gremio. El letrado culpa de ello a que la Xunta ha dejado en manos de los ayuntamientos el control del botellón y muchos concellos hacen dejación de esas funciones, muchas veces «por falta de medios». Consultada por La Voz al respecto, al cierre de esta edición desde la Xunta no habían respondido aún a esas críticas.

Desde el sector médico no se han andado con rodeos. Fandiño dice que la razón de que haya botellón nada tiene que ver con esa prohibición de la que habla el colectivo. La cuestión, añade, «es que la sociedad ha de entender que el botellón como un problema. El alcohol tiene muchos efectos secundarios en el desarrollo de los chavales». Vázquez no ve en la declaración de la Federación más que una defensa de su negocio porque desde luego el aumento del consumo no tiene nada que ver con una normativa. Y advierte que el que vaya a emborracharse puede hacerlo también con cerveza.

El consumo de alcohol está prohibido hasta cumplir los 18 años

La ley de prevención del consumo de alcohol en menores del 2010 prohíbe la ingesta de esas sustancias hasta los 18 años. Lo basa en las graves consecuencias que implica beber sobre el desarrollo cerebral de los menores. Cualquiera que dé a un menor sustancias con alcohol, independientemente de la graduación, corre el riesgo de que le pongan una multa de hasta 3.000 euros.

Estiman que Galicia acogerá unas 530 fiestas ilegales por Fin de Año

Este año podrían celebrarse en Galicia en torno a 530 fiestas ilegales de Fin de Año (más que hace un año), de las que ya en torno a 90 se celebrarán en Vigo, en locales que no reúnen las condiciones de seguridad para un evento de ese tipo. Es otra de las denuncias realizadas ayer por Pousada, que avanzó que son «restaurantes o bares que retiran el mobiliario para convertirlo en una pista de baile, cuando no tienen autorización para tener música ni menos aún un DJ».

También asegura que no se cumplen los horarios estipulados para cada tipo de locales y, de este modo, se producen situaciones curiosas como que en Santa Comba había una gran cantidad de establecimientos dados de alta como tablaos para poder cerrar más tarde. «Había más tablaos flamencos que en toda Andalucía», asegura.

Por otra parte, como informa Alberto Mahía en A Coruña, desde la Federación Gallega de Empresarios de Salas de Fiesta y Discotecas (Fesdiga) se alerta de que en la ciudad podría haber entre 40 y 50 fiestas ilegales durante este Fin de Año.

En Santiago, informa Elisa Álvarez, los hosteleros no tienen constancia de cuántas puede haber durante la primera madrugada del año en Compostela.