El reggae marca un ritmo cadencioso al Miño en Goián

La Voz

VIGO

El festival musical ofrece hoy sus últimas actuaciones junto al Espazo Fortaleza

01 sep 2017 . Actualizado a las 19:47 h.

Goián volverá a izar hoy, a partir de las 20.00 horas, la bandera de la música jamaicana para disfrutar de la segunda jornada del Festival Minho Reggae. El escenario está situado a pocos metros del Espazo Fortaleza, junto al río Miño. La entrada para la jornada de hoy cuesta 20 euros.

Nacida en Cabo Verde, Mo’Kalamity es una de las figuras del programa de hoy. La caboverdiana criada en Francia toma el reggae como una herramienta para transmitir mensajes reivindicativos. Mo’Kalamity and The Wizards ofrecerán reggae basado en las raíces.

Con más de 700 conciertos por toda Europa a sus espaldas llega a esta octava edición del festival Minho Reggae Sunsplash Rod Taylor, legendaria voz jamaicana. En esta nueva gira por Europa, Taylor cuenta con la banda Positive Roots, que desde la ciudad de Toulouse llega con su cantante Bob Wasa. Es decir, sobre el escenario miñoto se reunirán una leyenda Rasta y una de las mejores bandas del reggae francés.

Esta octava edición no sería lo mismo sin los aires multiculturales de Nueva Caledonia que acerca Marcus Gad co su roots reggae, llenando canciones de la cultura de su isla del Océano Pacífico. Los espectadores podrán conocer las canciones y el espíritu de su nuevo álbum, denominado Chanting.

Se completa la oferta de grupos con Dandy Fever, una banda coruñesa nacida en el 2002 para hacer música jamaicana, principalmente ska tradicional, reggae y rocksteady. Lograron hacer un estilo propio, pero respetuoso con la tradición. Además, introdujeron la lengua gallega en muchos de sus temas.

El Festival Minho Reggae Splash también quiere ser una plataforma de difusión y promoción de la artesanía. Hasta mañana, artesanos venderán sus productos y realizarán exhibiciones de cestería y cerámica.

Los asistentes contarán con zona de acampada gratuita a pocos metros del recinto de conciertos. Son cuatro mil metros cuadrados cerca del río amparados por la sombra de un pinar, que dispone de baños y todos los servicios mínimos, y controlado por personal de la organización para garantizar una convivencia respetuosa y el cuidado del espacio. Hay un espacio para quienes acudan con caravana o furgoneta.