Povisa acumula 7 millones en pérdidas en dos años del concierto con el Sergas

Ángel Paniagua Pérez
Ángel Paniagua VIGO / LA VOZ

VIGO

Oscar Vazquez

El hospital concertado registra otro año negativo a pesar de recibir más dinero público y de seguros privados

27 jul 2017 . Actualizado a las 05:00 h.

El Hospital Povisa lleva perdiendo dinero desde el momento en que firmó su último concierto con el Sergas, que entró en vigor en septiembre del 2014. En el 2015, Povisa declaró pérdidas por valor de 3,9 millones de euros. Las cuentas del 2016 se aprobaron hace doce días en una reunión del consejo de administración de la sociedad y arrojaron otros 3,2 millones de euros de pérdidas.

Por lo tanto, en los dos primeros años completos del nuevo concierto entre el Sergas y Povisa, la empresa con la segunda plantilla más grande de Vigo ha perdido 7,1 millones de euros, según las cuentas de la propia compañía, auditadas por Deloitte y a las que ha tenido acceso La Voz. A preguntas de este periódico, el hospital declinó hacer comentarios.

El concierto es el mayor contrato de gestión de servicios que tiene formalizado la Xunta con una empresa privada. Solo el año pasado, el Gobierno gallego abonó al hospital de la calle Salamanca 80,6 millones de euros. El Sergas paga 540 euros cada año por cada uno de los pacientes que asigna a Povisa. Desde el mes de diciembre son 139.000, el máximo que permite el concierto, lo que supone 75 millones. Pero además, el hospital privado factura por otros conceptos, como la asistencia a pacientes que no están dentro de su perímetro -por ejemplo, si un usuario del Cunqueiro necesita una intervención maxilofacial o de otro servicio que no haya en el hospital de Beade, es derivado a Povisa y esta cobra al Sergas-, por determinados fármacos y por programas especiales para reducir la lista de espera.

Con el concierto anterior Povisa nunca perdió dinero. Solo en el 2010, precisamente el último año de vigencia de aquel contrato, cuando el hospital y la Consellería de Sanidade rompieron públicamente.

Aunque ahora sí pierde, Povisa admite que el contexto es mejor. En febrero del 2016 incorporó en torno a 3.500 tarjetas sanitarias, de ciudadanos que decidieron cambiarse desde el Hospital Álvaro Cunqueiro, tras su complicada puesta en marcha. Los cambios se pidieron en noviembre y el Sergas los tramitó en febrero, pero en todo caso esa incorporación supone casi dos millones de euros más. En diciembre sumó otros 2.200 pacientes, aunque por tan pocos días que no tienen impacto en las cuentas. Pero sí lo tiene el plan de reducción de la lista de espera que la Xunta activó en toda Galicia el año pasado y con cinco millones de euros.

Además, el sector privado mejora. El 23 % de la actividad de Povisa es con mutuas y particulares. En los dos últimos años, según reconoce en sus cuentas la propia sociedad, el sector privado ha roto su tendencia a la baja y acumula ya una subida del 16 % de la actividad, porque hay más ciudadanos que suscriben seguros y las mutuas laborales están creciendo.

Inyección extra

A todo lo anterior se une que el Sergas inyectó en enero de este año 9,5 millones de euros extras por deudas pendientes desde antes del 2014, del concierto anterior.

De hecho, en el 2016 Povisa facturó 104,3 millones de euros, frente a 99,6 del año anterior. Es la mayor cifra de negocio de su historia. Pero al declarar tantas pérdidas, queda en el aire ver cómo afronta su futuro el hospital.