El Chapela con remeras de Tirán y Coruxo mantiene viva la llama en la ría de Vigo
09 jul 2016 . Actualizado a las 05:00 h.Definido como «estilo de vida», las traineras aúnan sacrificio, constancia y compañerismo. Tres valores que las chicas del Club de Remo Chapela dominan a la perfección. A pesar de participar en una liga formada por tan solo tres equipos, las redondelanas luchan en cada regata por superarse y, sobre todo, pasárselo bien compitiendo.
En la actualidad, el equipo femenino de traineras de Chapela está formado por veinte chicas, aunque llegar a este número no ha sido fácil. Para poder competir en la Liga Gallega de Traineras (LGT) han tenido que buscar más allá de la parroquia redondelana. Tres chicas del Club de Remo Coruxo y ocho de Tirán, acompañan a nueve del propio Chapela, la mayoría de ellas con poca experiencia en el deporte pero con muchas ganas de progresar: «Nas de aquí temos cinco séniors e catro xuvenís, pero a maioría das rapazas son moi novas. Teñen tan só un ou dous anos de remo e as que máis catro ou cinco», explica el entrenador del equipo femenino de traineras, Manuel Malvar.
La juventud del equipo de traineras les otorga una serie de beneficios y de inconvenientes. Por una parte, en la LGT les será difícil competir con el Cabo da Cruz, que participa junto al equipo ferrolano de A Cabana: «O Cabo da Cruz está moi por enriba, métennos corenta ou cincuenta segundos por regata», admite Malvar. Como parte positiva, la edad del Chapela permite que se fijen otros objetivos. El proyecto del equipo se erige en torno a la formación de las chicas: «Intentamos apostar pola liga feminina, fomentando o remo e formando ás rapazas. O máis importante é que estean contentas e ilusionadas. Traballamos día a día para achegar o remo ás mulleres e para facerlles ver que non é un deporte de homes», indica el preparador de las chicas de Chapela, aunque no rehúye fijarse alguna meta en el campeonato gallego: «Queremos gañar en todas as regatas que poidamos a Cabana, que é o equipo a bater. Buscamos a melloría e promocionar as traíñas para facer unha liga de seis, trece ou as que se poidan».
Crecer como remera implica también una serie de sacrificios a los que las chapelanas están dispuestas a someterse. Entrenan tres días a la semana y su dedicación al deporte es máxima, como resalta el entrenador «muchas veces te quita de estar con los amigos o de ir de fiesta, es como una religión».
La seriedad de las traineras llega al punto que las propias integrantes del equipo tienen que competir entre ellas. De las catorce remeras que participarán en las pruebas, seis tendrán que ser descartadas, aunque la rotación es el sistema que ha elegido Malvar para que todas «prueben lo que es una regata».
Hoy participarán en la III Bandera de Redondela Feminina. Esta vez será una regata a dos contra Cabana, dado que Cabo participará en otra prueba en aguas vascas. Intentarán ganar o, al menos, continuar con su «estilo de vida».