Los alumnos del IES Proval fabrican robots que practican sumo

Monica Torres
mónica torres NIGRÁN / LA VOZ

VIGO

monica torres

Tres escolares han quedado segundos en el concurso organizado por la Fundación Barrié

02 jun 2016 . Actualizado a las 05:00 h.

El IES Escolas Proval organiza combates de sumo. No es que profesores y alumnos se hayan convertido en promotores de lucha libre japonesa sino que programan robots para enfrentarse sobre el tatami. El centro, que escala desde años puestos en el ránking nacional de las nuevas tecnologías, ha incorporado este año la asignatura de Robótica y rematan el curso escolar con premio. Sergio Prado, Iago Pena y Juan Martínez, han quedado segundos en la categoría de bachillerato y ciclo medio del Concurso Gallego de Robótica La magia de la robótica, organizado por la Fundación Barrié y la Institución Galega de Ciencia y en el que participaron 2.335 alumnos de 62 centros gallegos. Sus creaciones y las de sus otros siete compañeros de esta materia de configuración libre atrajeron ayer las miradas de las decenas de personas que acudieron a la jornada de Expoelectrónica con la que, ya es tradicional, clausuran el curso escolar. Los robots montados y programados con un kit de Lego han conseguido los mejores tiempos en el concurso de gallego de los desafíos de la robótica. «Lo más difícil es aprender a programarlos, saben seguir un laberinto, contar personas, y no pueden salir del tatami», explicaban ayer los aventajados alumnos del instituto en el que se imparten clases teóricas y prácticas de electrónica desde hace más de 35 años.

También suscita expectación la videorockola. Los responsables de este proyecto desarrollado por ocho alumnos del instituto, también acaban el curso con premio. Los profesores Carmen Currás y Fernando Rodríguez, responsables de los departamentos de audio y vídeo respectivamente, fueron galardonados por el Ministerio de Educación con el premio nacional de calidad e innovación en FP. «Es un sistema innovador de reproducción audiovisual a demanda con pantalla táctil y la carcasa se construyó con una impresora 3 D», señaló ayer Carmen Currás, una de las artífices. El dispositivo se ha diseñado, apunta, «siguiendo criterios de bajo consumo y de bajo coste, a través de técnicas de amplificación de audio eficientes y control del sistema por microcontrolador».

Todos los alumnos presentaron ayer sus proyectos de fin de curso en una jornada de puertas abiertas en la que demostraron sus habilidades. Los jóvenes practicaron en un chutómetro que mide la velocidad de tiros a puerta y enseñaron a programar portales de garaje automáticos, semáforos y equipos de videovigilancia. El Ciclo Superior de Mantenimiento Electrónico se afianza como cantera de trabajadores para empresas de Porto do Molle.