Un desahuciado que vivió 11 meses en un coche logra un piso social

E. V. Pita VIGO

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E.V.Pita

«Cáritas me da de comer y la PAH me ayudó a tramitar la vivienda», dijo Jesús Fernández

27 may 2016 . Actualizado a las 09:27 h.

El desahuciado Jesús Fernández, un vigilante nocturno en paro, ha agradecido esta mañana la ayuda recibida por la Plataforma de Afectados de las Hipotecas  (PAH) para obtener un piso de alquiler social en Vigo.

«Coticé durante 22 años pero llevo seis años en paro. O pagas el alquiler o comes, así que dejé de pagar el alquiler. Me desahuciaron y me mandaron a los albergues municipales, llenos de personas marginadas, pero me negué en rotundo, yo era un trabajador y deportista y preferí irme a dormir en un coche en Samil. No tenía derecho al risga pero tuve suerte de que una trabajadora social llamada Ana Sánchez me pusiese en contacto con Cáritas, que es la que me mantiene y si estoy vivo es gracias a esta entidad porque me da de comer. Y gracias a la PAH he conseguido un estudio en Vigo de 35 metros cuadrados de alquiler social de la Xunta por el que pago 35 euros», contó el afectado.

«Mejor que un coche es un estudio pero me lo dieron sin suministros porque no tengo luz ni agua porque la Xunta no los subvencionan. Hacen las cosas a medias, no el trabajo completo», añadió el afectado. 

«Los trámites que hicimos nosotros los pudo haber hecho la trabajadora social. Es escanear unos documentos y mandarlos a la Xunta para que le otorgasen a esta persona la ayuda de emergencia social pero él tuvo que pasar once meses en un coche y que se tuvo que empadronar en la sede de los servicios sociales del Ayuntamiento», indicó la presidenta de la PAH, Carlota Pérez. 

Medio centenar de activistas de la Plataforma de Afectados por la Hipoteca apoyaron al implicado. 

La presidenta de la PAH de Vigo, Carlota Pérez, entregó en la oficina de reparto de los juzgados una solicitud al juez decano para que se investiguen las titulaciones. Se trata de que los bancos están vendiendo sus hipotecas a fondos de inversión pero luego, en caso de hipoteca, reclaman la ejecución de la hipoteca. La PAH considera que si una hipoteca ya no es del banco se supone que el hipotecado podrá negociar con los fondos unas mejores condiciones.

Como mínimo hay 500 personas en Vigo que esperan un piso de alquiler social pero no quedan libres. «En Vigo es donde hay más desahucios de la provincia aunque se diga que no hay», dice Pérez.

Ahora trabajan en un nuevo caso en Tui de una hipotecada que convive con su marido gravemente enfermo y que tienen riesgo de derribo de su vivienda y desalojo de otra que el banco quiere subastar. La PAH baraja hacer una acampada de protesta en función de las negociaciones.