Piden que la Xunta participe en Barreras y Vulcano si fracasa la gestión privada

EFE

VIGO

XOÁN CARLOS GIL

La CIG apunta que existen dos realidades en la ría, la de los grandes astilleros con poca contratación y los pequeños, que se mantienen pero no logran un repunte

22 mar 2016 . Actualizado a las 19:17 h.

La Federación de Industria de la CIG solicitará que la Xunta se plantee su participación en los consejos de administración de los astilleros Barreras y Vulcano si tras reunirse con los mismos se percata de que la gestión privada «no da sus frutos» y no consigue «revitalizar» el sector en la ría de Vigo.

Así lo ha manifestado el secretario nacional de CIG-Industria, Xoán Xosé Bouzas, en una rueda de prensa en la que también han participado el responsable de naval del sindicato, César Rodríguez, el secretario nacional del sector, Emilio Cagiao, y representantes de los trabajadores de los astilleros de la zona.

Bouzas ha advertido de la existencia de «dos realidades» en el sector en la ría de Vigo, por un lado, la «preocupante» de los grandes astilleros -Vulcano, Barreras y Metalships & Docks-, donde «prácticamente no hubo contratación» en los últimos dos años.

Por otro lado, la de las pequeñas factorías como Cardama, Armón o Freire, que gozan de «actividad para mantener las instalaciones» aunque no viven una «situación de repunte».

El astillero Metalships «se sostiene con lo poco que hay en reparación»; Barreras se verá con «carga de trabajo cero» y entrará «en subactividad» cuando finalice el flotel de Pemex este verano y para Vulcano se presentan «expectativas» que sin embargo no suponen «una salida» a su situación actual, ha enumerado.

Pérdida de empleo

Bouzas ha achacado esta situación, que ha provocado que el sector pasase en la comarca de los 10.000 trabajadores en 2008 a los 1.400 de 2015, a la anulación del tax-lease y a la «desaparición» de Pymar como «fuente de financiación», además de a la «falta de iniciativa» de las administraciones públicas y también de los empresarios.

Es por ello que la CIG iniciará una ronda de contactos con la Xunta y los grupos del arco parlamentario gallego para transmitirles su propuesta, que va acompañada de otras como «establecer algún tipo de coordinación» con los astilleros pequeños.Posteriormente, harán lo propio con los empresarios.

Además, el sindicato planteará al Gobierno central la creación de un fondo de compensación para los trabajadores con el objetivo de garantizar las prestaciones económicas y contrarrestar las pérdidas sufridas por la plantilla entre 2008 y 2015 en cuestiones como las bases de cotización de las pensiones o la reposición de subsidios de desempleo.

Xoán Xosé Bouzas también ha explicado que, en algunos casos, las plantillas de los astilleros se reducen al «equipo técnico» y las empresas auxiliares acogen a la mayoría de los trabajadores.

En el caso de Armón, de sus 200 trabajadores 40 pertenecen a la empresa principal y 160 a auxiliares; en Cardama trabajan 60 personas y 50 en auxiliares; en Metalships hay unos 90 empleados y otros 70 en las empresas auxiliares; en Vulcano 90; en Barreras, 115 y 300 en auxiliares; y Freire emplea a 55 personas de forma directa y a entre 400 y 500 de manera indirecta.

Representantes

Durante la rueda de prensa también han hablado los representantes de varios astilleros que han narrado la situación actual y las expectativas que les transmite la empresa en cada uno de los casos.

Arturo Abal, representante de los trabajadores de Metalships, ha explicado que este astillero se mantiene realizando labores de reparación y construye un yate «que no tiene armador», sin contrataciones nuevas a la vista.

La empresa ha transmitido a la plantilla que el principal problema reside en el nuevo tax-lease, ya que los armadores extranjeros «no se quieren acoger» al mismo, y en la bajada del precio del crudo, que ha llevado a la compañía a buscar nuevos nichos de negocio como el de los ferrys.

Jorge Rodríguez, de Vulcano, ha narrado que la situación en este astillero es «más o menos la misma»; mientras que el representante de los trabajadores de Barreras, Rafael Pérez, ha reconocido que la compañía negocia la construcción de un crucero de lujo.

Aunque para este trabajo se presentan «problemas de financiación» y «de otro tipo», ha dicho Pérez, ya que la compañía nunca ha realizado un pedido de estas características.

Finalmente, César Rodríguez ha afirmado que el naval es el único sector capaz de crear entre 7.000 y 8.000 puestos de trabajo «de manera inmediata» y ha alertado de que está «en proceso de desaparición».