Descubren en el Trega una gruta del siglo IV antes de Cristo única en el norte peninsular

Monica Torres
mónica torres A GUARDA

VIGO

monica torres

En la estructura, de cinco metros de largo, se hallaron restos de ánforas púnicas y de figuras de bronce

18 feb 2016 . Actualizado a las 21:46 h.

El equipo de arqueólogos de Rafael Rodríguez ha descubierto en Santa Trega una gruta del siglo IV antes de Cristo. El experto, que dirige la mayor intervención realizada hasta la fecha en el barrio descubierto por Cayetano de Mergelina en las excavaciones efectuadas entre 1928 y 1933, confirmó ayer este insólito hallazgo durante la presentación del proyecto de la Diputación y el Ministerio de Fomento para la puesta en valor de los 18 yacimientos galaico-romanos de la provincia. «No hay nada similar en todo el noroeste peninsular. Es, sin duda, un hallazgo sorprendente, una cáscara de huevo arqueológica», indicó entusiasmado.

Se trata de una gruta de unos cinco metros de largo y 2,20 de profundidad en la que han localizado, además, pedazos de ánforas púnicas y figuras de bronce. «Aún no hemos podido dar con su utilidad, está vinculado al almacenamiento y, al principio pensamos que pudiera ser para extraer arcilla, pero no tendría sentido porque estaba tapada con jabre», explicó a pie de excavación. Recordó que existen leyendas del imaginario gallego que hablan del submundo de los castros, pero puntualizó el carácter científico de su trabajo.

«Lo cierto es que esta excavación nos está generando más interrogantes que respuestas a preguntas pendientes», confirma Rafael Rodríguez tras medio año de trabajo en Mergelina. En este tiempo confirmaron la hipótesis de este catedrático que remonta la primera ocupación del principal castro gallego hasta el siglo IV antes de Cristo, dos antes de lo que se conocía. «La datación es una de las afirmaciones rotundas que han caído pero también el diseño del castro, porque se hablaba de un protourbanismo pero no, esto es urbanismo real con calles públicas y privadas, los muros delimitan los barrios en los que estaba dividido todo el monte», señala.

Rodríguez apunta otras sorpresas como la de que en todo el monte había un sistema de canalización y drenaje del agua. Es paradójico porque 2.000 años después el segundo lugar más visitado de Galicia no tiene estos servicios. El alcalde Antonio Lomba, que destacó la centralidad del Trega y de los nuevos proyectos, recordó que dotar de agua y de saneamiento al Trega sigue siendo una prioridad.

Otra de las incógnitas es el uso de las cistas que han aparecido en varios puntos de este barrio, perfectamente distribuido sobre una superficie de 2.000 metros cuadrados con 45 estructuras (11 casas familiares). Estos recipientes podrían haber tenido distintas finalidades, quizás posibles maceteros si bien «hay bancos que podrían emplearse para ritos de divinidades». En la datación ha sido también importante la localización de tres monedas, «una de Augusto, otra de Tiberio y una tercera de Claudio».