22 concellos lusos y gallegos del Miño crean una marca turística para captar fondos europeos

Monica Torres
mónica torres TUI / LA VOZ

VIGO

CEDIDA

La iniciativa, en la que participa la Diputación de Pontevedra, pretende 7,5 millones

14 feb 2016 . Actualizado a las 05:00 h.

Los veintidós municipios que bañan las dos orillas del Miño desde Crecente y Melgaço hasta la desembocadura en Caminha y A Guarda constituirán una agrupación europea de cooperación transfronteriza (AECT). Estas entidades creadas por Bruselas en el 2006 sirven para organizar y gestionar acciones conjunas. En este caso, el objetivo es poder solicitar y gestionar directamente los fondos europeos. 

En el proyecto liderado por la Diputación de Pontevedra, su homónima lusa, que es la Comunidad Intermunicipal del Miño-Lima (CIM), y la asociación Uniminho (16 municipios gallegos y cinco portugueses), pretenden lograr 7,5 millones de fondos europeos para hacer un proyecto turístico común con el río Miño como eje conductor.

Los alcaldes de los municipios participantes, la presidenta de la Diputación y el de la CIM, Carmela Silva y José María Costa, respectivamente, así como los comandantes navales de Tui y Caminha participaron ayer en la presentación oficial de la candidatura que opta a al programa Interreg V y que fue presentada por el diputado Uxío Benítez. El regidor tudense, Enrique Cabaleiro, como anfitrión, fue el primero en pedir que se borren las fronteras administrativas «porque es la mayor dificultad que tenemos las poblaciones que vivimos a cien metros para desarrollar proyectos juntos». Fue la premisa en los discursos de todos los ponentes y se recogió en la Declaración de Tui, un documento suscrito entre la Diputación y la CIM para crear la agrupación europea (AECT). Se eligió la fecha del 13 de octubre por ser el aniversario el aniversario de la firma del Tratado de Lisboa de 1668.

Manoel Baptista, alcalde de Melgaço y presidente de Uniminho, presentó las líneas de Visit Río Miño, el proyecto turístico que pretenden desarrollar entre el 2016 y el 2020. «El objetivo es crear la marca Río Miño a través de actividades transfronterizas de preservación, cualificación y valorización ambiental  que involucre a todos los sectores».

Esta zona se presenta como «un territorio único con una identidad en común para generar valor, oportunidades de crecimiento y cohesión social y atraer   flujo económico». Según avanzó Baptista, la candidatura se desarrolla con acciones específicas que se ejecutarán hasta el 31 de diciembre de 2019 en tres partes con un plan estratégico de márketing territorial. El programa incluye la preservación e interpretación de todo el  patrimonio natural y cultural transfronterizo, mejorando su conocimiento y creando modelos de turismo.

El conjunto de actuaciones que se pretenden acometer incluyen la promoción del turismo de naturaleza, gastronómico y vitivinícola, un sector en auge. Para ello se comprometen también a asegurar la presentación de los productos y las artes de pesca propias y tradicionales y crear estructuras de apoyo a las actividades de las empresas de animación asentadas en la zona. La expansión de rutas verdes, como la que ya está prevista entre Tomiño y Cerceira, es otra prioridad.